El espectáculo de la canasta volvió a la isla de la mano del All Star de la Liga Ibiza Basketball. Roger Esteller y Rafa Jofresa, dos de las estrellas invitadas, hicieron las delicias de los 150 aficionados que se dieron cita en el pabellón de es Pratet para presenciar un evento que pretende sumar en un deporte que vivió tiempos mejores en las Pitiüses años atrás, cuando había equipos en Liga Femenina, Liga Femenina 2 y Liga EBA.
Los mejores jugadores de la competición doméstica, a los que se unieron los citados baloncestistas y la torre Saad Kaiche (2,30 metros), disfrutaron de una jornada baloncestística para el recuerdo. También asistió a la cita el exprofesional italiano Gianmarco Pozzecco, que reside en la pitiusa sur y defiende la camiseta del Formentera, si bien no pudo participar en el partido de exhibición por una lesión. Sí lo hizo, en cambio, en el concurso de triples que se llevó a cabo en el descanso. De hecho, se apuntó la victoria.
El encuentro transcurrió por los cauces previstos. Los participantes trataron de jugar de cara a la galería, dando rienda suelta a su imaginación con pases por la espalda, sin mirar, lanzamientos lejanos o acciones individuales de alto calibre.
De los invitados, el que más se dejó ver fue Esteller. El exbarcelonista dejó dos pases de costa a costa para la retina, entre otras cosas. Kaiche, que no jugó demasiado por unas molestias en la boca que le hicieron pasar por el dentista ayer, aportó en la pintura y Jofresa demostró que quien tuvo retuvo. Su muñeca sigue siendo de lujo. También lo dejó claro precisamente en el concurso de triples, donde finalizó segundo en una final a tres junto a Pozzecco y Jorge Rosa. El transalpino firmó 14 puntos, la mejor marca de la tarde, para hacerse con el triunfo por una diferencia mínima de un punto sobre el ex del Joventut.
El primer cuarto –cada uno duró 12 minutos a reloj corrido– destacó por su igualdad. En las primeras acciones se pudo comprobar cómo Esteller buscaba emparejarse con Jofresa. La imagen era memorable, porque, además, los dos actuaron con camisetas retro de sus exequipos. Entre risas se cubrían con el codo y compartieron ratos de diversión. Y es que, al fin y al cabo, ése era el objetivo: pasarlo bien y promover el basket.
Con 36-34 en el electrónico para los amarillos –o lo que es lo mismo, para los de Roger– se llegó al término del primer periodo. El segundo resultó clave, pues nada tuvo que ver con el anterior. Sin Kaiche sobre la pista y con Jorge Rosa haciendo de las suyas desde el perímetro, como en sus mejores tiempos con el Sa Graduada, los rojos se encontraron con un 69-51 adverso que se encargó de cerrar el argentino con un triple.
Tras una larga pausa debido a la celebración del concurso de triples, el encuentro se reanudó con la igualdad por bandera. Finalmente, el cuadro amarillo hizo buena su ventaja para apuntarse la victoria por 118-97 en un encuentro en el que Jorge Rosa, autor de 35 puntos, fue nombrado el mejor jugador.