Pablo Alfaro compareció ayer en rueda de prensa para tratar la actualidad de la UD Ibiza y el compromiso de mañana contra el Talavera en el estadio de Can Misses (12.00 horas). El técnico celeste recordó que, pese a estar bastante lejos de la zona de play off, el equipo está compuesto por «profesionales» y «las carreras de fondo acaban al final».
«Las derrotas tienen que doler. Cuando pierdes tiene que doler. Muchas veces analizas las cosas más profundamente cuando no ganas. Estábamos dolidos porque nuestra intención en Marbella de inicio no era perder. No hicimos méritos para ganar, pero eso ya pasó la semana pasada. Nuestra intención ahora es sumar los tres puntos y lo que venga vendrá.
Un equipo no debe lamerse las heridas cuando pierde ni sacar los pies del tiesto cuando gana», dijo.
Sobre si siente algo de presión en el cargo tras dos partidos sin conocer el triunfo, apuntó: «Los proyectos que son ganadores quieren estar arriba. Tampoco nos tienen que demonizar tanto. Tenemos que ser un equipo ambicioso, ser ambiciosos y también realistas».
Con respecto a si espera que los jugadores más veteranos den un paso adelante, indicó: «Nos tenemos que pedir todos más. Tenemos que salir de la zona de confort. Y va por todos. La ambición no es sólo de palabra, sino que hay que demostrarla. Así es cómo se construye un equipo. No quiero jugadores conformistas porque bajan el nivel del equipo».
La posibilidad de cambiar el sistema de inicio de un 4-2-3-1 a un 4-4-2 para que jueguen juntos Ángel Rodado y Jordi Sánchez no es una idea desorbitada para Alfaro: «Puede darse el caso. Han coincidido aunque no haya sido de inicio. Es una alternativa. Tenemos que manejar varias a sabiendas de que, con la plantilla configurada, ya no te queda más recámara para modificar el dibujo. No me da ningún temor porque han coincidido y es una cosa que tenemos que aprovechar».
En cuanto al rival del fin de semana, destacó que «no es un equipo que sea cobarde en cuanto a que se repliegue». «Se atreve a ir por el rival», agregó.
En el capítulo de bajas, la única duda radica en la portería puesto que Álex arrastra molestias y podría dejar su sitio a Lucas. Mariano parece difícil que entre en la convocatoria. «Desde 2018 no ha jugado un partido oficial. Es un futbolista que pude aportar y en pocas semanas estará en condiciones de hacerlo», comentó el preparador de los unionistas sobre el central argentino.