Cuestión de ética

El comunicado emitido ayer por la UD Ibiza se permitió la licencia de añadir en su último punto lo siguiente: «Esperamos y deseamos que Periódico de Ibiza, desde hoy mismo, comience a dedicar el tiempo que merece a nuestro fútbol base, informando con la misma magnitud y espacio que hoy –por ayer– pero recogiendo las noticias, resultados y avances de nuestros clubes y futbolistas». Por si alguien no lo sabe, los lectores tienen todos los lunes a su disposición en este rotativo dos páginas que se sumergen en las categorías inferiores de fútbol: una con las clasificaciones y resultados locales, y otra con las crónicas de la Liga Nacional juvenil, ésa en la que la UD Ibiza, desafortunadamente, acaba de descender. Esta sección y medio de comunicación cumplen diariamente de manera impoluta y profesional. Aunque yo no me atrevería a decirle a un club de fútbol cómo debe hacer su gestión, le doy la bienvenida a esta sugerencia sobre nuestro trabajo. Lo que pasa es que si ya hay hermetismo en torno al primer equipo a la hora de tener el acceso deseado a nivel informativo, no quiero ni imaginar con menores de por medio. Sin embargo, ya avanzo que este medio ni puede ni quiere, a día de hoy, dar pie a esta idea, más que nada porque las categorías base están para formar, no para competir, por si alguien aún lo desconoce. Aquí no se pretende dar cabida a crónicas de goleadas tipo 20-0 en categorías como, por ejemplo, la alevín, resultados que firmarán aquellas ‘selecciones' ibicencas que algunos ya hicieron y otros quieren llevar a cabo. Cuestión de ética.