Los ingredientes estaban puestos sobre la mesa para dar un salto de calidad en todos los sentidos. La UD Ibiza jugaba por primera vez en su historia por el liderato, lo hacía en un derbi balear y con una entrada en Can Misses como hacía años que no se vivía. Casi 3.500 espectadores en una mañana de puro fútbol. Los mallorquines fueron los que celebraron, mientras que los ibicencos se fueron a sus casas con la tristeza pintada en el rostro. Era un partido para enamorar, para enganchar, pero el juego no fue ni mucho menos el mejor.
El Atlético Baleares se llevó un partido con poco fútbol. Sin apenas ocasiones, sobre todo para los celestes. Un tiro de Javi Pérez fue de lo poco reseñable en el apartado ofensivo, con excepción de la recta final en la que los ibicencos apretaron más.
En cuanto al once, Pablo Alfaro apostó por Mariano para cubrir la baja de Gonzalo, lesionado en su rodilla izquierda. Además dibujó una banda derecha muy ofensiva con Kike López en el lateral y Raí por delante. Recuperó a Núñez que volvía de sanción en detrimento de Arranz y quiso darle fuerza al centro del campo con la entrada de Sibo. En la portería, el técnico aragonés volvió a apostar por Lucas que había conseguido dejar su meta a cero en las últimas jornadas.
Tras una primera parte igualada, el gol de los visitantes cambió todo. Alfaro movió el banquillo en busca de soluciones que no llegaron. Javi Lara no pudo. La dupla Diego Mendoza-Rodado no fue efectiva en esta ocasión. Tampoco se vio la eficacia y fortaleza física que estaba mostrando la Udé en las rectas finales del encuentro.
La UD Ibiza perdió una oportunidad de enganchar y enamorar, la oportunidad de ser líderes, pero seguro que llegarán más.
Se escaparon dos puntos
La Peña Deportiva estuvo a punto de conseguir lo que nadie había logrado, ganar en Boadilla del Monte. Los de Raúl Casañ vieron como se les escaparon dos puntos con un gol de los madrileños en el minuto 90. El 1-1 ante el Internacional fue amargo, pero no deja ser un punto importante en una de las salidas más complicas de la liga.
El técnico valenciano apostó por reforzar el centro del campo con la entrada de Casado en el doble pivote. Adelantó a Pepe Bernal y quitó del once a Ramón Blázquez que había sido titular en el partido de Luanco. El resto de jugadores de ataque y defensa, fueron los que vienen siendo habituales en las alineaciones de Casañ. No queda ninguna duda de que a estas alturas de la temporada, Leo es el portero titular del técnico peñista. Y siendo honestos, con paradas como las que hizo en Madrid será difícil quitarle.
El plan salió bien. Los primeros minutos fueron de mucha igualdad y cuando mejor estaba la Peña llegó un penalti que no falló Bernal. A raíz del gol, el encuentro se convirtió en una batalla entre un Internacional que asediaba con balones colgados y un conjunto ibicenco que intentaba matar a la contra. El empate pudo llegar antes, pero también pudieron sentenciar los pitiusos en la segunda parte.
Con la expulsión de Marc de Val, el partido se complicó mucho más y se convirtió en un ejercicio de resistencia que estuvo a punto de salir con éxito.
Finalmente llegó el gol local para ensombrecer el gran trabajo defensivo peñista. Al final un punto, la Peña sigue sumando y continúa en puestos de play off.