Nueve puntos de nueve posible. Portería a cero. Son los datos de un líder sólido. No es ningún secreto que la UD Ibiza es uno de los equipos que salieron a competir con el objetivo de lograr el ascenso. Su candidatura es firme. Ayer contra el Atzeneta no brilló en su juego, pero logró tres puntos muy trabajados. El gol de Davo, que lleva tres en otros tantos partidos, fue suficiente para que los ibicencos sigan con su racha triunfal.
Los visitantes se plantaron en Can Misses con cinco jugadores que pasaron por la disciplina celeste. Lucas, Iosu Villar, Javi García y Javi Serra, fueron titulares. Kike Ferreres entró en la segunda parte. El balón comenzó a rodar con dos equipos que se respetaban y tanteaban. La Udé quería la pelota, pero el Atzeneta tampoco estaba dispuesta a regalarla. Tras unos minutos para medir fuerzas, el primer aviso lo dieron los locales. Kike López enganchó un balón en la frontal del área que puso en apuros a Lucas, que atajó en dos tiempos.
A medida que iba pasando el tiempo, los pitiusos cada vez mandaban más sobre el esférico y el partido comenzó a jugarse en el campo valenciano. Los visitantes intentaban salir con balones largos buscando a su delantero Carlos Esteve.
En el 15, nuevamente Kike López estuvo a punto de marcar. El lateral, ayer extremo, se adelantó a los defensas en un centro lateral y remató con la zurda poniendo en apuros a Lucas que respondió bien. En esa acción el jugador celeste que pidió tímidamente penalti se hizo daño en el hombro y pocos minutos más tarde, tras llevarse otro golpe, tuvo que retirarse, dando entrada al jugador con ficha del filial Karim.
Tras la lesión, el partido se volvió a igualar. El Atzeneta dio un paso adelante y los ibicencos empezar a tener más problemas para encontrar huecos para avanzar. Kike López estaba siendo el jugador más activo y la UD Ibiza notó su ausencia.
Cuando peor estaba el partido, paradón de Lucas. Un centro desde la izquierda llegó hasta el otro costado donde Grima volvió a poner la pelota al área. Ahí apareció Karim que remató de cabeza y se encontró con una gran mano del exmeta celeste que, con ayuda del larguero, la envió a córner. Corría el minuto 36.
Fue la última acción reseñable de una primera parte que se acabó sin goles y en la que en los minutos finales se calentó un poco con alguna acción dura por parte de los dos equipos. En el descanso, Carcedo decidió buscar alternativas en la zona de ataque y dio entrada a Javi Lara y a Castel por Cirio y Rodado.
El gol tiene nombre
El primer aviso de la segunda parte llegó en las botas de Davo. El atacante asturiano decidió jugársela en solitario cuando tenía a Karim acompañando la jugada. El disparo se marchó alta y la ocasión se perdió.
En el 49, Davo ya no falló en una gran jugada de la Udé. Karim condujo el balón, cambió el juego para Fran Grima que se marchó con una buena maniobra y velocidad de su marcador y puso un centro al corazón del área para que Davo, que sigue su idilio con el gol, controlase y batiese a Lucas con un buen disparo a la media vuelta.
El tanto sentó muy bien a los celestes que se hicieron completamente con el partido y los acercamientos se empezaron a suceder. Balones centrados en busca de un remate que no llegaba, pero que parecía cercano. Cuando mejor estaban los locales fue el Atzeneta, en el 59, quien pudo empatar en una buena jugada que finalmente acabó con un tiro flojo a las manos de Germán.
El ímpetu local se fue enfriando con el paso de los minutos y el encuentro se volvió a igualar. Mucho juego en el centro del campo y muy pocas ocasiones. La tuvo Sibo en el 80. El centrocampista golpeó con calidad desde lejos, pero se encontró con una palomita de Lucas que la mandó a córner con una buena estirada.
En el 84, se salvó la Udé. El silencio se pudo escuchar en Can Misses cuando Christian recibió el balón dentro del área, se la dejó atrás a Chico para que rematase ya sin portero. El gol parecía cantado, pero apareció Rubén para bloquear el disparo y salvaguardar los tres puntos.
Dos minutos más tarde fue Castel quien evitó el remate con una acción providencial en un balón parado. Sufría el conjunto celeste ante el empuje de los valencianos. En los compases finales, con cinco minutos de descuento, los de Carcedo supieron dormir el encuentro apenas pasaron cosas y el partido se fue muriendo con el 1-0 en el marcador.
Pitido final y tres nuevos puntos para un líder que no brilló en su juego, pero volvió a mostrar su solidez y oficio.