La crisis sanitaria mermó la participación en la XXXVI Milla Urbana Isla de Ibiza –26 entre todas las categorías–, pero no ha impedido que esta edición quede para el recuerdo. No en vano, el final tanto de la prueba elite masculina como de la elite femenina fue de foto de llegada. Yurena Hueso y Rubén Gómez acabaron alzándose con la victoria en una cita que pasará a la historia también por celebrarse en la pista de atletismo de Can Coix. Usualmente, este evento transcurre por el puerto de Sant Antoni, de ahí su nombre de Milla Urbana, pero, con motivo de la pandemia de la COVID-19, se trasladó este año a la pista del citado complejo deportivo.
En la prueba elite femenina, en la que tomaron también parte dos corredoras de otra categoría, las tres participantes cruzaron la meta juntas con un tiempo de 5'35'' tras una bonita carrera con constantes cambios de líder en cada vuelta de 200 metros. Finalmente, y tras revisarse una improvisada foto finish con los medios gráficos, el título se lo adjudicó la manisera Yurena Hueso, actual campeona de España sub-23 de 800 metros, por delante de su compañera Nara Elipe Esteller, segunda, y Carla Masip Gimeno, tercera.
La ganadora se mostró «muy contenta» después de no haber podido competir «desde marzo». La felicidad era total porque «volver fue duro, con pequeñas lesiones en verano». «Estoy contenta de volver sin molestias», agregó. Sobre el desenlace de la carrera, comentó: «Al final, hemos llegado juntas. Somos amigas».
En la cita elite masculina, con seis corredores de esta categoría y dos de la sénior, la batalla también estuvo muy reñida hasta el final. Un grupo de tres atletas, compuesto por Rubén Gómez, Carlos Muñoz y Juan Antonio Gil, marcó el ritmo de cabeza desde el principio. Tras la segunda vuelta, Muñoz pasó a liderar el grupo, siempre con sus rivales pegados a él. Tras la quinta, Gómez pasó a la primera posición, con Gil siguiéndole los talones y Muñoz un poquito más rezagado durante dos giros.
Cosa de dos
En la séptimo vuelta ya quedó claro que el título se lo iban a jugar los dos integrantes del Playas de Castellón. El tirón de Muñoz le permitió ir acercándose más y más a un Gómez que acabó aguantando la quinta marcha imprimida por su compañero en un final superajustado y que decidió el campeón por milésimas de segundo. Ambos corredores cruzaron la meta con un tiempo de 4'30'', tres segundos menos que Gil, que completó el podio.
El vencedor se mostró «contento» por el triunfo. «Ha sido una carrera que he intentado controlar desde el primer momento, poniendo un ritmo más o menos cómodo para, en la parte final, apretar un poquito más. Me he dado un par de relevos con mi compañero Carlos y, en la parte final, he decidido hacer un cambio progresivo, viendo el cambio de otro de los rivales, y llegar a meta como pudiera», explicó.
El del Playas de Castellón reconoció que vio peligrar la victoria en el esprint: «Iba muy justo de piernas. Las tenía que ya no sabía correr bien y oía por megafonía que Carlos venía fuerte, así que pensé que me pasaría. Si llega a tener 1.611 metros la carrera –dos más que la milla–, me habría ganado seguro».