La UD Ibiza ya está clasificada para el playoff de ascenso. El equipo ibicenco se impuso por 0-1 al Nàstic de Tarragona, que perdió su cuarto partido de la temporada, y se aseguró matemáticamente la primera plaza en esta segunda fase. Hizo historia al conquistar el campeonato del grupo III de Segunda B, con el consiguiente billete incluido para las eliminatorias directas por el salto de categoría. Un solitario gol de Castel al filo del descanso decantó la balanza para el lado unionista.
Hay partidos en los que el juego es lo de menos, en los que lo único importante es conseguir la victoria. El de la jornada anterior contra el Barcelona B, más aún con las importantes bajas en la medular, era uno de ellos y el de ayer, también. En juego estaba el título honorífico de esta liguilla y la clasificación para las dos rondas a superar si se quiere subir al segundo escalón del fútbol español, al profesionalismo total y absoluto.
La Udé, como ante el filial azulgrana, no realizó un juego brillante. Ni siquiera fue mejor que su rival en lo que a dominio se refiere, pero dejó ayer su portería a cero y aprovechó una de sus escasas llegadas parar lograr su objetivo. Y eso era lo que importaba.
La primera mitad tuvo dos partes muy diferenciadas. Hasta el ecuador, la UD Ibiza llevó la iniciativa. Cierto es que no dispuso de grandes ocasiones porque fallaba en el dichoso último pase, pero tenía controlado el juego ante un Nàstic que se veía superado en el terreno de juego.
A pesar de la ausencia de Javi Pérez, al que el míster volvió a reservar por sus recientes molestias físicas, el regreso de Manu Molina al once inicial después de haber cumplido su partido de sanción permitió a los celestes llevar la batuta, no como en la jornada anterior contra el Barça B. Sin embargo, las llegadas de los visitantes solamente se producían a balón parado y en una contra en la que, sorprendentemente, a Kike López le ganaron la partida por velocidad.
Los catalanes mostraron una gran dureza en labores defensivas hasta el punto de ver una amarilla en el primer minuto. No se sentían cómodos sobre el campo y sus ataques se redujeron a un par de disparos de Bonilla, muy activo en estos primeros 45 minutos.
El escenario cambió mediado este primer periodo. La Udé pasó de dominadora a dominada.
El cuadro local dispuso de varias ocasiones, pero tenía el punto de mira desviado. Oliva, Oriol y Fran Miranda no acertaron con la portería, algo que sí hizo Castel. El delantero de la UD Ibiza cabeceó a las mil maravillas un centro de Javi Lara para marcar en el minuto 43 y firmar el 0-1 con el que se llegó al descanso.
La segunda parte
Tras el asueto, el Nàstic salió como un ciclón en busca del empate. Brugui pidió penalti por una entrada de Fran Grima nada más arrancar el duelo y Carbia, acto seguido, envió fuera un disparo picado al segundo palo.
Los jugadores grana regresaron tan revolucionados al campo que no habría pasado nada si hubieran expulsado a Carbia a los cuatro minutos por una entrada con los tacos por delante sobre Manu Molina. El árbitro castigó la acción con amarilla.
Los locales empezaron a volcar su juego sobre Oliva. El ‘nueve' dispuso de dos buenas oportunidades para empatar, especialmente un remate en el área pequeña tras un centro de Tienza, pero ambas se marcharon fuera.
No menos clara fue la ocasión que tuvo Bonilla a falta de un cuarto de hora para el final. Albarrán cabalgó por el costado derecho, puso una pelota buenísima por delante del punto de penalti y allí apareció el exjugador de la UD Ibiza para rematar libre de marca.
Afortunadamente para los unionistas, el esférico salió por la derecha de la portería de Germán.
El conjunto de Juan Carlos Carcedo, que había tratado de encontrar algo de frescura en punta con la entrada de Davo y Ekain por Rodado y Kike en el 59, tuvo que vivir atrincherado en la recta final. El Nàstic insistía en la búsqueda del empate, pero la Udé no estaba por la labor. Sibo entró al campo por Javi Lara para fortalecer defensivamente la medular y los celestes aguantaron el 0-1 hasta el final para asegurarse matemáticamente la primera plaza, independientemente de lo que pase en los tres partidos que quedan, y sellar su billete para el playoff de ascenso.
Carcedo: «Hemos sabido contrarrestar sus virtudes»
Juan Carlos Carcedo, entrenador de la UD Ibiza, destacó el trabajo defensivo de su equipo al término del partido contra el Nàstic de Tarragona: «Hemos sabido contrarrestar bien las virtudes del Nàstic, sobre todo a nivel defensivo». Por su parte, Toni Seligrat, técnico de los catalanes, dijo: «El rival ha planteado un partido muy bueno defensivamente y ha sido eficaz en la única ocasión que ha tenido. Hemos sido superiores en todos los conceptos futbolísticos excepto en la eficacia».