Que Amadeo Salvo es de gatillo fácil no sorprende a nadie en Ibiza, pero quizá pocos esperaban que fuese a despedir de manera fulminante a Juan Carlos Carcedo con el equipo fuera de los puestos de descenso. El ya extécnico celeste fue fulminado este sábado tras caer (0-2) contra el Real Sporting de Gijón. Poco más de una hora después de que el árbitro pitase el final del encuentro, el club emitió el comunicado en el que anunciaba el despido y le deseaba las mejores de las suertes al entrenador riojano.
Cabe recordar que Carcedo llegó a Can Misses en verano de 2020 para ponerse al frente de un equipo que tenía el único objetivo de ascender a Segunda División. El que hasta ese entonces había sido segundo entrenador de Emery empezaba su andadura en solitario y lo hizo con éxito. Con una gran plantilla, dotó al equipo de una solidez defensiva que lo hizo prácticamente imbatible hasta que se logró el ansiado ascenso con el histórico partido ante el UCAM Murcia.
Como no podía ser de otro modo, la directiva apostó por la continuidad del técnico para su estreno en Segunda División. Empezó bien su aventura y, tras una primera crisis de resultados, el equipo logró enderezar el rumbo.
La hoja de servicios del técnico en esta temporada y media es de 25 victorias, 15 empates y 11 derrotas en 51 encuentros. Completó la primera vuelta en Segunda División con 25 puntos –la mitad de los famosos 50 que se dicen que garantizan la salvación– y deja el equipo seis puntos por encima del descenso, a la espera de que finalice la jornadas con los partidos de hoy.
Se veía con fuerzas
En la rueda de prensa posterior al encuentro, Carcedo fue preguntado sobre si veía peligrar su puesto y por cómo se encontraba él. «Estoy con fuerzas y moral. Veo a los jugadores como intentan, como estamos hasta el final. Veo que los jugadores quieren y eso me da moral y fuerzas. Estamos a mitad de temporada y estamos en una situación que podría ser mejor, pero creo que para un recién ascendido... Creo que nos va a venir bien el parón y vamos a volver con muchas fuerzas. Estoy convencido de que los jugadores lo van a sacar adelante porque estamos en un situación todavía buena», aseguró.
En esa misma línea, señaló: «Estamos a mitad de una maratón y creo que hemos cumplimentado lo que te suele dar la permanencia –25 puntos–. Nos hubiese gustado sacar los tres puntos, pero tengo tranquilidad porque sé que son rachas. Después de Navidad vamos a volver con energías renovadas».
Por último, tras ser cesado dejó un mensaje en sus redes sociales: «Dejamos de pertenecer a la UDIbiza. Gracias a las personas que forman parte del club, a los jugadores, a los aficionados que siempre nos habéis apoyado y especialmente a mi cuerpo técnico. De corazón, los mejores éxitos para la UD Ibiza».