Licencia para soñar. Eso es lo que sacó la UD Ibiza en la tarde-noche de este sábado al doblegar por 2-1 al Cartagena en Can Misses. No le habían pitado ningún penalti a favor en toda la temporada y esta vez le concedieron dos, los cuales transformaron Guerrero y Herrera para noquear al cuadro albinegro y asomarse al balcón de la fase de ascenso.
El resumen del partido.
Paco Jémez siguió fiel a sus ideas y dio entrada a su once habitual. La alineación fue la misma que la de la jornada anterior, con la única novedad de Juan Ibiza por Gálvez en el eje de la zaga. El primero regresaba a la convocatoria tras haberse perdido el duelo anterior por ciclo de amonestaciones, mientras que el segundo no entró en la lista al haber visto la cartulina roja en la derrota contra el Almería (2-0).
El técnico cordobés no había tocado prácticamente nada en su once, pero el míster visitante Luis Carrión hizo todo lo contrario y llevó a cabo cuatro modificaciones. Alcalá, Buffarini, Cayarga y De Blasis salieron de inicio, relegando al banquillo a Datkovic, Delmás, Okazaki y Álex Gallar.
El encuentro no siguió los derroteros previstos. Acostumbrados en las últimas jornadas a ver una Udé ultraofensiva y llegadora, lo cierto es que en esta ocasión distó mucho de ser ese equipo atacante. Eso sí, el Cartagena estaba en las mismas. Ni un ni otro eran capaces de generar peligro.
Con todo, una jugada aislada permitió a los celestes romper el cerocerismo. Davo se lanzó un autopase sensacional ante su defensor, centró al área y, en ella, Gastón Silva desvió la trayectoria del esférico con la mano. El árbitro, Quintero González, no lo vio, pero desde la sala VAR le indicaron que revisara la acción y fue entonces, tras ver la jugada en la pantalla, cuando decretó el punto de los 11 metros. Guerrero asumió la responsabilidad de lanzar la primera pena máxima de la temporada para los unionistas y no falló. Minuto 20, 1-0 para el cuadro pitiuso.
El duelo entró en una fase de mucho centrocampismo y pocas ideas. Y eso, en el fondo, beneficiaba a los de Paco Jémez, que iban por delante en el marcador. Sólo una acción individual de Mo Dauda, que acabó con una buena palomita de Álex Domínguez, hizo tambalear el tanteador. Pero si los celestes no habían necesitado demasiado para marcar, el Efesé, tampoco. En el tiempo de descuento, Rubén Castro cazó un balón en el interior de área, bailó con él ante los defensas y el portero para acabar picando el esférico hacia un Mo Dauda que cabeceó a la red. Jarro de agua fría justo al borde del descanso, al que se llegó con tablas (1-1).
La segunda parte
Tras el asueto, la UD Ibiza mejoró sus prestaciones notablemente. Pasó a dominar el partido por completo y realizó en apenas nueve minutos más llegadas que en toda la primera parte. Goldar y Manu Molina fueron los protagonistas de estos primeros acercamientos.
Paco Jémez decidió darle una vuelta de tuerca al partido. Metió a Javi Lara y Javi Pérez por Guerrero y Diop, buscando más calidad que músculo.
La Udé siguió insistiendo en la búsqueda del segundo gol y este acabó llegando. Castel fue derribado por Vázquez en el área y el árbitro, de nuevo a instancias del VAR, pitó penalti. Guerrero no estaba ya sobre el césped y fue Herrera el que pidió la pelota. Con un disparo raso a su izquierda, puso el 2-1 en el electrónico.
Los cartageneristas fueron incapaces de darle la vuelta a la tortilla. Los ibicencos continuaron llevando la batuta y los albinegros no hallaron la forma de poner en peligro a Álex Domínguez. Y eso que lo intentaron hasta con el portero Marc Martínez en el área rival en el último minuto. No les sirvió de nada. La UD Ibiza se llevó los tres puntos y se coloca a tiro de la zona de playoff de ascenso. Hay licencia para soñar.