La UD Ibiza Gasifred cayó ayer en la cancha del Covisa Manresa por 3-2, un resultado que supone un paso atrás en su objetivo de alcanzar el playoff de ascenso a Segunda. Un último minuto para el olvido condenó a los celestes, que pasaron del cielo al infierno en un santiamén. No en vano, ganaban por un gol en el 39 y acabaron hincando la rodilla.
El comienzo del partido fue eléctrico, con dos tantos en el minuto cuatro, uno de cada equipo. Víctor Delgado adelantó a los celestes en una contra finalizada en el segundo palo, pero Carles Ambrós empató en un abrir y cerrar de ojos. Pese a la intensidad del arranque, lo cierto es que ya no se movió el marcador hasta la segunda parte.
De nuevo Víctor Delgado, en una acción similar a la de su primer tanto, puso por delante al Gasi a los ocho minutos de la reanudación. Tal y como transcurría el choque, espeso y sin apenas ocasiones, a los catalanes no les quedó otra que dar entrada al portero-jugador a falta de cinco minutos para el final para tratar de reaccionar.
Lo cierto es que la jugada le salió perfecta al Manresa. Los pupilos de Nacho Garrido aguantaron su ventaja durante cuatro minutos, pero no más. Entonces, se produjo la remontada local. Carles Lavado y Eric Castillo voltearon el marcador en cuestión de segundos y sellaron el 3-2 definitivo.