El derbi ibicenco de Segunda RFEF se juega este domingo por la mañana (12.00 horas) en Santa Eulària. La Peña Deportiva y el CD Ibiza se ven las caras en un encuentro que no solo tiene la connotación de derbi, sino que también enfrenta a dos equipos que están haciendo las cosas bien y se están consolidando como firmes candidatos a pelear por el ascenso.
Los de Santa Eulària llegan a esta cita en un gran estado de forma pese a perder la última jornada en su visita al Hércules. Los de Manolo González habían cuajado un buen partido y la derrota quizá fue un castigo excesivo para un conjunto que marcha tercero en la tabla.
Más allá de todo eso, el técnico peñista es sabedor de la dificultad que conlleva el encuentro, pero en la previa del mismo quiso huir del carácter especial que conlleva un derbi y centrarlo más en el aspecto clasificatorio. «Para mí es un partido más, la verdad. Es un partido perfecto para intentar ganar y distanciar a un rival directo», dijo. Para este choque, González podrá contar con su once de gala, pero no así con Cruz y Loren, que siguen recuperándose de sus dolencias físicas. Por su parte, el CD Ibiza llegará a Santa Eulària con prácticamente todo el plantel disponible al tener sólo la baja de Enric Tarrés.
Los de Vila, que llegan a esta encuentro con la moral alta tras conseguir la victoria en la última jornada y encadenar dos porterías a cero, están teniendo esta temporada el mismo problema del pasado curso. La efectividad lejos de casa baja mucho y todavía no saben lo que es ganar a domicilio. Visitan un campo muy complicado como es el de la Villa del Río, pero lo hacen con el convencimiento de que pueden sacar algo positivo.
El técnico de los rojillos, Raúl Garrido, sí que habló del carácter especial que tiene este partido: «Un derbi es un partido especial. Más allá de que sean tres puntos como el resto de partidos, existe la rivalidad sana de dos equipos vecinos que quieren llegar a lo más alto en la categoría. Un derbi siempre es bonito, ilusionante y atractivo».
Además, no ocultó que se enfrentarán a un gran adversario: «Es uno de los mejores rivales de la competición. La temporada pasada se quedaron a muy poco del ascenso y hace pocos años disputaron un playoff de ascenso a Segunda A. Nosotros trabajamos para estar en ese nivel y disputar cosas bonitas».
Un rival histórico
Una hora antes, a las 11.00 horas, en Sant Francesc arrancará el Formentera-Hércules. Los rojinegros se miden al gran favorito al ascenso, un conjunto alicantino que no empezó de la mejor manera posible, pero que tiene el presupuesto más alto de la categoría y por tanto una de las mejores plantillas.
Los de Míchel Alonso llegan en un buen momento tras lograr la victoria en sus dos últimos encuentros y ganar confianza. La liga está muy apretada, pero navegan en mitad de la tabla a tan solo un punto del playoff. Intentar ser sólidos en defensa volverá a ser la premisa para un equipo que espera mantener su buena dinámica. Eso sí, los de la pitiusa sur deben mejorar de cara al arco rival.