Amadeo Salvo, presidente de la UD Ibiza, aseguró este viernes que el nuevo convenio, que caduca el próximo año, debe estar listo en marzo. El máximo mandatario celeste comentó que «el mundo profesional te exige mucho a nivel de infraestructuras», donde están «limitados», y se deben poner en marcha las mejoras desde entonces para que estén listas para la próxima temporada. El mandamás unionista indicó que tiene que presentar unos papeles en esas fechas a LaLiga sobre dónde jugará y que, por ende, la renovación del convenio se debe producir antes de las elecciones.
Salvo dijo que el actual estadio es «ineficaz para trabajar, pero es lo que hay y seguimos adelante».
Sobre el hecho de que el PP pidiera en el pleno que no se renovara hasta las elecciones, comentó que «el desconocimiento es muy peligroso» y que hay que conocer «las normas que tiene que cumplir un club profesional» o «las inversiones». «Lo que tienen que hacer antes de eso es llamarme y preguntarme. Esto es una empresa de Ibiza que factura 10 millones y tiene ciento y pico trabajadores, y las empresas no son las que se tienen que aproximar a las empresas y al ciudadano», continuó.
Sobre las mejoras a acometer, señaló: «LaLiga te exige y también la Ley del Deporte. Tenemos que cumplir la Ley del Deporte y Espectáculos Profesionales. Tenemos que hacer una UCO, instalar fibras en todo el estadio, cámaras para tener identificado a cualquier aficionado ante cualquier incidencia.... Eso son cientos de miles de euros. Tenemos que cambiar la iluminación. Estamos pagando 6.000 euros de sanción cada partido por no cumplir el reglamento de iluminación. Toda la la inversión ha sido privada en un estadio con dos años de convenio. La inversión hay que hacerla para que esté disponible a principios de temporada y eso son cuatro o cinco meses de trabajo. No podemos estar esperando». En este sentido, subrayó que está «seguro» de que «con el Ayuntamiento no va a haber ningún problema».
Salvo también se pronunció sobre la problemática actual con el CD Ibiza por el uso de Can Misses 3: «No quiero hablar de eso ya. Nosotros hemos sido discretos y vamos a seguir siéndolo. No podemos entrar en la sinrazón y la sinrazón no tiene ningún sentido. Cualquier cosa se utiliza como se quiere. Nosotros cumplimos el convenio. El campo de abajo es muy complicado. No debería entrenar nadie más de dos días porque no hay drenaje. La base de Can Misses 3 es arcilla compactada. Es un foco de lesiones. Todo viene por el ‘dren' de la pista de atletismo, que no hay. Está a otra altura. En ese campo hay que invertir. Nosotros estamos cada vez utilizándolo menos y cualquier día nos va a poner LaLiga una multa por utilizar el campo (Can Misses) más de lo que toca. No se puede utilizar más de 500 horas al año. Y hay que invertir 200 o 300.000 euros en un ‘dren' nuevo e inutilizar la pista de atletismo. ¿Problema? Si hacemos eso tenemos que parar la pista de atletismo un mes. Ese campo hay que pincharlo cada día. El mantenimiento nos cuesta más del doble que el de aquí. No tiene sentido».
En cuanto a este mismo asunto, añadió: «No quiero hablar de nadie al que le envías un burofax porque le contestas y te publica al día siguiente un documento privado entre dos entidades en un medio de comunicación. Por lo tanto, dejémoslo así. Que cada uno siga su camino. Nosotros seguimos el nuestro y, de momento, aunque estemos malitos, nos ha ido bien».
En lo meramente deportivo, descartó una revolución en el mercado invernal: «El entrenador está contentísimo. Hay que esperarle a él. A lo mejor no traemos a nadie o nos dice que hay que reforzar esto. Una revolución en el fútbol profesional no existe. No se puede. Para traer a siete tengo que sacar a siete, y es imposible colocar a siete».