Daniel Fuzato es el segundo portero que más paradas ha hecho en lo que va de liga en Segunda División. El guardameta de la UD Ibiza ha detenido el balón en 74 ocasiones en los 26 partidos que ha defendido los palos ibicencos. Sólo Óscar Whalley, del Lugo, ha tenido que intervenir más en lo que va de curso con 83 paradas, habiendo disputado también 26 encuentros.
El brasileño es de lo poco salvable en el equipo ibicenco esta temporada. Los números son claros, aunque es el portero que más goles ha encajado, también es uno de los que más para. La prueba del algodón no engaña y es que si se miran los porteros que más han tenido que intervenir esta liga, la mayoría son de los equipos de la zona baja. No en vano los dos porteros que más paradas han hecho este curso pertenecen al último y al penúltimo clasificado.
También hay señalar que hay un portero que para más que ellos, pero que aparece más abajo en la lista porque ha jugado menos. El portero del Cartagena, Aarón Escandell, lleva 72 intervenciones en 21 partidos para tener una media de 3,43 paradas por encuentro. El que más de toda la competición. De hecho, en porcentaje de paradas por partido, Fuzato cae a la quinta posición con 2,85. El mencionado Whally es el tercero con una media de 3,19. En la segunda posición se cuela Rubén Yáñez. El portero del Málaga ha jugado relativamente poco este curso, pero en los 13 encuentros en los que fue titular hace 3,23 paradas de media. El cuarto es Amir Abedzadeh. El iraní de la Ponferradina ha hecho 55 paradas en 19 encuentros, lo que significan 2,89 por partido, una cifra ligeramente superior a la de Fuzato.
Por contra, el portero que menos tiene que intervenir –contando sólo los que llevan más de 10 partidos– es Juan Soriano con una media de 1,92. Sólo hay otro portero que baja de las dos paradas por partidos y es el guardameta del Alavés, Antonio Sivera, con 1,96.