Criado entre Formentera e Ibiza, pero con corazón argentino, hace tiempo que Luka Romero (México, 2004) ha dejado las Pitiusas para soñar con cotas más grandes en el mundo del fútbol. Su paso por el Mallorca le catapultó a la élite y sus últimos pasos los dio en la Lazio. Romero tiene 18 y acaba contrato con el club italiano, algo que le ha vuelto a poner en el punto de mira de los grandes de Europa.
Todos los rumores hacen indicar que será el Milán el que se lleve al prometedor futbolista que juega en las categorías inferiores de Argentina y recientemente participó en el Mundial sub-20. No es el único que ha sonado como posible destino. También el Benfica o el Barcelona estarían tras las pistas de este joven que empezó a deslumbrar al mundo en la playa de ses Illetes.