El circuito ATP da hoy el pistoletazo de salida con las principales raquetas del planeta tenis en la línea de salida de Doha, donde Rafael Nadal vivirá su puesta de largo oficial de 2010 tras conquistar el torneo de exhibición de Abu Dabi. El torneo qatarí aguarda otro pulso entre el mallorquín y Roger Federer, que ayer escenificaron un espectacular duelo sobre una alfombra mágica.
Un total de 62 torneos en 32 países completan un mapa de competición que en estas fechas cuenta con tres puntos de interés. Doha comparte protagonismo con el torneo australiano de Brisbane y la cita de Chennai, que cuenta entre sus principales alicientes con el regreso de Carlos Moyà a las pistas.
Todos los focos se posan en Doha con 1'2 millones de dólares en premios y con el aglutinamiento de las principales figuras. Rafael Nadal, que ha recuperado la dinámica ganadora en las últimas semanas con la conquista de la Copa Davis y las victorias sobre David Ferrer y Robin Soderling en Abu Dabi, estrenará la competición oficial con intensidad, ya que tomará parte del cuadro individual y del cuadro de dobles en un torneo que ha ganado en ambas modalidades.
El italiano Simone Bolelli será posiblemente mañana el primer obstáculo del número dos del mundo en Qatar, donde Rafael Nadal formará pareja con Marc López para defender el título conquistado el pasado ejercicio en la competición de dobles.
El sorteo ha sido benévolo con el tetrcampeón de Roland Garros, a excepción del primer encuentro. En caso de victoria el tenista mallorquín se mediría en la siguiente ronda con el vencedor del partido que enfrenta al italiano Potito Starace y el portugués Frederico Gil, mientras que el obstáculo en cuartos podrían ser Guillermo García o el marroquí Younes El Aynaoui. El ruso Mikahil Youzhny y el serbio Viktor Troicki parten como favoritos para alcanzar unas semifinales en las que Roger Federer, por su parte, tendría que vérselas presumiblemente con Nikolay Davidenko, aunque el suizo también podría enfrentarse con el gigante croata Ivo Karlovic.
Carlos Moyà no tendrá precisamente un estreno sencillo en el torneo de Chennai, ya que el sorteo le ha deparado un primer enfrentamiento con el cuarto cabeza de serie, Janko Tipsarevic. El palmesano, que participa en el torneo con una invitación de la organización, se ha impuesto en la única ocasión en la que se ha enfrentado con el tenista serbio, pero su principal desafío radica en acumular sensaciones positivas en su vuelta a la competición oficial.
Moyà, de 33 años, se retiró de las pistas en el torneo de Acapulco en febrero. Tras varias visitas a los médicos decidió someterse en abril pasado a una operación para solucionar sus problemas de artrosis en el pie derecho, que requirió de una operación, y en el tendón y hueso del isquión de la pierna derecha. Dicha operación y la rehabilitación de la misma le apartó de las pistas hasta el pasado mes de septiembre, que volvió a retomar sus entrenamientos en pista. Cabe destacar que Carlos Moyà volvió a competir en el Campeonato de España y posteriormente disputó la Copa Argentina.