La necesidad marca el duelo que enfrenta hoy en el Pabellón Insultar Santiago Martín al Tenerife Rural y al Bàsquet Mallorca. Los locales han catalogado el choque de final atendiendo a su calendario inmediato y a las urgencias de su posición en la tabla, pero los mallorquines también se autoexigen el triunfo para cambiar la dinámica en la que se han instalado tras tres derrotas consecutivas.
El técnico del Bàsquet Mallorca, Xavi Sastre, recupera a Berto Alzamora para reforzar un juego interior que sufrirá la más sensible baja de Daniel Northern, que dispone de permiso con motivo de su reciente paternidad. Sastre pretende que los suyos sepan sobreponerse a las dificultades y confía en recuperar las prestaciones que convirtieron a los mallorquines en una de las sensaciones del curso.
El partido de hoy no tendrá nada que ver con el duelo que enfrentó a ambos contendientes en la primera vuelta. El Bàsquet Mallorca sonrojó a los tinerfeños en Inca, pero el Tenerife ha experimentado una metamorfosis espectacular desde la llegada de Lou Roe. El jugador de Atlantic City se ha erigido en la principal referencia del grupo entrenado por Iván Déniz, cuyas opciones dependen en buena medida de sus prestaciones.
El Mallorca quiere recuperar el terreno perdido tras tres derrotas consecutivas, pero el propio Xavi Sastre tiene claro que «Tenerife no es el lugar idóneo para enderezar la situación; en la primera vuelta les ganamos de 31 puntos, pero que nadie se engañe, son otro equipo, se han reforzado muy bien y será muy complicado».
En cualquier caso, el técnico aprecia la capacidad de superación de los suyos y advierte que «estamos tocados, pero cuando un equipo está herido es capaz de sobreponerse a la adversidad y remontar el vuelo».
Para revertir la dinámica negativa Sastre defiende el estilo de juego ofensivo que define al Mallorca y analiza que «el hándicap de jugar un baloncesto rápido, alegre y sin especulaciones es que el día que no estamos acertados somos extremadamente vulnerables». Además, también hace autocrítica y señala que «no entiendo como no somos capaces de poner en práctica lo que hacemos en los entrenamientos, no es normal que nos hagan cien puntos en cada partido y eso, en gran parte se debe a nuestra fragilidad defensiva».
Alto voltaje
El conjunto mallorquín ha señalado en rojo el encuentro tras tres derrotas seguidas, pero su rival ya se ha apresurado en señalar el choque como una final. como si fuera una gran final. El técnico de la escuadra chicharrera, Iván Déniz, apuntó ayer que «hay cuatro partidos de los que nos quedan en casa ante Mallorca, Vigo, Palencia y La Palma que tenemos que afrontar como si nos estuviéramos jugando la vida».
Déniz hizo un llamamiento a la afición para generar el ambiente de las grandes ocasiones en el Pabellón Insular Santiago Martín y dejó entrever la inquietud que le genera la visita del Mallorca: «Tengo bastante miedo al juego alegre del rival, un equipo muy rápido y de muchos puntos». Además, también consideró que «ellos saben perfectamente a lo que juegan y lo que tienen que hacer. No esperaban perder en la pasada jornada ante La Palma y querrán recuperar cuanto antes esa derrota».