Levante 0 - 1 Valencia
Levante: Reina, Cerra, Robusté, Ballesteros, Juanfran, Pallardó (Sergio, m.65), Xavi Torres, Xisco Nadal (Xisco Muñoz, m.76), Rubén (Stuani, m.65), Juanlu y Caicedo.
Valencia: Guaita, Miguel, Stankevicius, Dealbert, Jordi Alba, Pablo (Feghouli, m.89), Maduro, Topal, Mata (Banega, m.90+), Soldado (Vicente, m.75) y Aduriz.
Gol: 0-1, m.83: Mata.
Àrbitro: Clos Gómez (colegio aragonés). Amonestó por el Levante a Ballesteros, Robusté, Stuani y Juanfran y por el Valencia a Aduriz.
Un gol de Juan Mata en posible fuera de juego y a pocos minutos del final decantó a favor del Valencia un derbi discreto en el que ambos equipos estuvieron muy imprecisos y que se decidió a partir de la mejoría visitante en el tramo final del partido.
Mata fue el protagonista del Valencia por segunda jornada consecutiva al decidir de nuevo el triunfo de su equipo y hacerlo también en una acción polémica, como ante el Espanyol, en esta ocasión en un partido en el que, además, falló un penalti en el primer tiempo.
El Levante no estuvo fino en el conjunto del encuentro y aunque mantuvo nivelado el choque durante setenta minutos, en los veinte finales jugó a remolque del Valencia.
La primera parte fue de muy baja calidad. Ni uno ni otro equipo logró imponerse a su rival y aunque el Valencia tuvo más posesión de balón, sus llegadas a la meta de Reina fueron escasas y apenas crearon peligro al meta levantinista.
El Levante, por su parte, se mostraba como un equipo ordenado, seguro en defensa y compacto en el centro del campo, pero con dificultades para llegar con convicción y con posibilidades de marcar ante la portería local.
A este duelo de imprecisiones se sumaron el árbitro y el valencianista Juan Mata. El colegiado señaló un discutido penalti de Robusté sobre Maduro y Mata lo envió fuera por encima de la portería de Reina. Era el minuto 27.
A partir de entonces, el Valencia fue capaz de controlar más el balón, pero su mejoría fue tímida y el encuentro llegó a su ecuador sin goles, sin oportunidades y sin apenas fútbol.
Pocas cosas variaron tras el descanso. La incapacidad ofensiva de ambos equipos se mantuvo al mismo nivel y todo hacía presagiar que el que marcara un gol se llevaría los puntos, a pesar de lo poco que ponían de su parte unos y otros para conseguirlo.
A falta de fútbol, la emoción corría exclusivamente por cuenta del marcador en un partido cada vez más de ida y vuelta, sin un dominador claro y con muy poca precisión por parte de ambos conjuntos.
Una falta lanzada por Mata que dio en el larguero (m.73) fue la ocasión más clara del partido hasta ese momento. A partir de entonces, el Valencia buscó más la portería rival que el Levante y en un contragolpe, Mata resolvió un mano a mano con Reina para marcar el 0-1 en una jugada en la que salió en fuera de juego.
Para entonces, el equipo visitante, tras la entrada de Vicente por Soldado, era mejor que el Levante, al que le faltó profundidad, sobre todo en el segundo tiempo y que no dio muestras de poder empatar el encuentro tras el gol de Mata.