José Ureña, el padre del joven fallecido Abel Ureña, recibió ayer por la mañana noticia de la captura del portero del Ushuaïa y cabecilla de la Mafia da Noite, Paulo César Baptista, según explicó, de forma «casi casi extra oficial» mediante una llamada de teléfono que le avisó de que el periódico portugués Correio da Manha informaba de la detención del responsable de la muerte de su hijo.
«Dentro de la tristeza es una alegría impresionante que este tío no disfrute ya de la calle», destacó Ureña, quien detalló que tiene conocimiento de que Baptista está Holanda, y de «que la zona estaba controlada».
También indicó que tenía la esperanza de que capturaran al prófugo Baptista porque el sumario del caso «estaba cerrado», una situación que la familia consideró en todo momento «una buena señal». «Al no estar abierto pensábamos que la investigación seguía hacia adelante, entonces estábamos un poquito tranquilos y, dentro de lo que hay, tenemos una alegría bastante grande», agregó.
Por otra parte, el padre de Abel Ureña aseguró que desconoce cuál será el futuro inmediato de Baptista aunque cree que «en principio, cuando se le detuviera, tenía que venir a España». «Ahora estoy intentando hablar con el abogado a ver si se pone en contacto con el juzgado a ver qué es lo que piensan hacer. Si viene para España o va a Portugal, no lo sabemos todavía», agregó.
En todo caso José Ureña, espera que «al igual que se le ha hecho el seguimiento por parte de la Guardia Civil, que ha llevado el caso bastante bien y con bastante discreción, ahora que le toca a la justicia, haga lo mismo». «Y porque no existe la pena de muerte, sino la pediríamos», concluyó Ureña.
«La mayor condena posible»
Por su parte, Lucía Román, novia de Abel, explicó ayer que recibió la noticia «con una mezcla de emociones»: «Alegría porque lo cogieron y no va a arruinar más vidas, y con tristeza porque si lo hubieran hecho antes Abel estaría acá. Son emociones encontradas», explicó la joven, que ahora espera que sobre Baptista recaiga «la mayor condena posible».
«Y que no salga más de la cárcel porque esto no fue sin querer, él sabe lo que está haciendo, es un prófugo y un asesino suelto, es una persona que no hace bien a la sociedad y que no sirve para nada», sentenció Román. «Entonces para tener a una persona que siga arruinando vidas, mejor que esté ahí guardadito, y que si tiene tanta fuerza que ayude a levantar paredes en la cárcel. Lo que espero, realmente, es que no salga más», concluyó.
Nace la asociación contra la violencia ‘Yo estoy con Abel'
Lucía Román anunció ayer que previsiblemente esta semana se presentará de forma oficial la agrupación ‘Yo estoy con Abel, asociación contra la violencia», cuyo objetivo será «ayudar» a familiares y amigos de otras víctimas de la violencia, «que pasan por lo mismo y que no saben por dónde empezar, como nos pasó a nosotros», explicó Román.
La nueva agrupación ya ha iniciado su andadura por las redes sociales donde cuenta con el apoyo de 2.200 amigos en facebook. Otra de sus finalidades será informar sobre el transcurso del caso de Abel Ureña.