Alrededor de 40 pilotos se manifestaron ayer en el circuito provisional de sa Coma por espacio de una hora para reivindiciar sus derechos como deportistas y solicitar a las instituciones una rápida reapertura de las únicas instalaciones de que disponen en la Isla para entrenar y competir.
Muchos de ellos llegaron pasadas las 10,30 horas dispuestos a manifestarse en el trazado clausurado hace más de un mes por la conselleria de Medi Ambient. A la entrada del acuartelamiento, el vigilante de seguridad hizo saber a los convocantes que tenía órdenes de avisar a la Guardia Civil, aunque no puso impedimentos para que accedieran al circuito, situado a un kilómetro de la entrada principal.
En apenas 10 minutos hicieron acto de presencia varias patrullas de la Guardia Civil en las instalaciones de motocross. Se vivieron instantes de tensión mientras se clarificaba el motivo de la concentración por parte de los pilotos. Los agentes identificaron a los participantes de la ‘quedada'. Finalmente se llegó a un entendimiento por ambas partes. Los manifestantes se quedaron sin entrenar, pero aprovecharon la movilización para intercambiar opiniones y promover nuevos actos de protesta.
Hacia las 11,30 horas, el grueso del grupo, junto a los cuerpos de seguridad desplazados, abandonaron el circuito. Allí permanecieron una decena de pilotos, entre ellos el delegado insular de motociclismo, Matías Rodríguez, ‘Matt'. «Ha sido una concentración positiva, la Guardia Civil nos ha ayudado a pesar de que venía avisada por la situación, que ha sido un poco tensa al principio. Lo que solicitábamos era que nos prestaran un poco de atención y que se dieran cuenta de que somos deportistas, que no venimos a delinquir», indicó.
El responsable del colectivo considera que en sa Coma «no molestamos» y que «no existe riesgo de incencios», motivo por el que sigue clausurado el recinto. «Han sacado un informe erróneo y los procedimientos no han sido adecuados», apunta Matt.
Los pilotos preparan nuevas medidas de presión. «La paciencia está agotada. Estamos pensando en presentar una denuncia formal al Consell en nombre del colectivo».
Y es que pilotos como Dani Juan, Dani Curreu, Rubén Cervantes o Carlos Sánchez, entre otros, se han visto obligados a abandonar el Campeonato de España de motocross o enduro. Los motoristas se preguntan «por qué no cierran los accesos a las calas, donde los márgenes están llenos de ramas, hojas secas y pinos». «Este es el único sitio de España donde cierran un circuito por riesgo de incendios», lamentan.