El piloto español Fernando Alonso (Ferrari) fue igual de escéptico que el resto de la parrilla sobre los cambios que pueden haber con la supresión del sistema de suspensión FRIC, reconociendo que es algo que «llevan casi todos» los coches del campeonato y que por ello «se va a mantener todo igual» en un Gran Premio de Alemania al que no llegan «por desgracia en una situación muy buena».
«No creo que haya grandes cambios. Es un sistema que llevan casi todos que es bastante complejo y no creo que la prensa tampoco pueda entenderlo, así que no intentéis descifrarlo. Se va a mantener todo igual», aseguró Alonso ante los medios españoles en el circuito de Hockenheim.
Respecto a los continuos cambios en el reglamento, el ovetense recordó que «siempre ha sido así». «O lo quieres o lo dejas. Crea más confusión en casa por la complejidad de estos sistemas y de poder explicarlos. Lo que la gente quiere ver es a los coches correr en la pista, adelantamientos, acción y lucha y ojalá se la podamos dar este fin de semana», comentó.
Por otro lado, sobre Hockenheim, trazado en el que ha ganado en las dos últimas visitas con Ferrari (2010 y 2012) y una tercera con Renault (2005), el bicampeón del mundo reconoció que este año lo afronta «de diferente manera». «Por desgracia no estamos en una situación demasiado buena. Sabemos que llegamos al fin de semana con nuestras limitaciones, luchando por conseguir lo máximo y por otros objetivos», confesó.
«Tenemos que intentar hacerlo lo mejor posible. Sabemos que tendremos más o menos nuestras oportunidades, pero depende de cómo afrontemos el fin de semana. Iremos a tope, al cien por cien, sabiendo que va a haber condiciones diferentes a las últimas carreras, con mucho calor y con los neumáticos blandos y superblandos, así que debemos tener un ojo en la degradación», sentenció.