Real Madrid 99 - 78 Barcelona
Real Madrid (29+20+22+28): Llull (21), Rudy (15), Carroll (4), Ayón (8), Mejri-cinco inicial-, Maciulis, Campazzo (3), Reyes (7), Bourousis (17), Rodríguez (6), Nocioni (7), Rivers (11).
Barcelona (14+25+20+19): Satoransky (5), Oleson (8), Abrines (8), Doellman (4), Tomic (17)-cinco inicial-, Huertas (8), Navarro (7), Pleiss (4), Nachbar, Lampe (8), Thomas (4).
Árbitros: Pérez Pizarro, García González, Pérez Pérez. Sin eliminados.
El Real Madrid revalidó el título de Supercopa Endesa con un holgado y cómodo triunfo ante el Barcelona por 99-78 en la final disputada en el Buesa Arena de Vitoria.
Los de Pablo Laso encadenan su tercer trofeo seguido, desde el año 2012, y repiten victoria y escenario como hace doce meses cuando también vencieron en el pabellón vitoriano ante el mismo rival.
Sólo tuvo color blanco el partido por el título porque el Real Madrid siempre fue por delante, salvo unos segundos en el inicio del partido. Además recuperó sus constantes habituales de juego veloz, alegre y alta anotación hasta llegar casi a los cien puntos.
Sergio Llull fue el baluarte del triunfo, con 21 puntos y nombrado además mejor jugador del trofeo de la Supercopa.
El Real Madrid apostó por la envergadura de Ayón y Mejri en el quintento inicial para equiparar la fortaleza interior del Barcelona.
Sin embargo el desequilibrio llegó con desde el exterior. Sergio Llull prorrogó su estado de gracia de la semifinal. El balear logró 15 de los primeros 22 puntos de su equipo, mientras el Barcelona solo tuvo a Tomic como referencia en los primeros ocho minutos, 22-12.
El Real Madrid encontró el juego fluido y vio canasta con facilidad. Todo lo contrario que el equipo catalán al que le costaba hilvanar jugadas y firmó unos pésimos porcentajes de acierto, sin anotar ninguno de los siete triples intentados.
Con un juego alegre de los de Pablo Laso se llegó al final del primer acto casi doblando a los de Xavi Pascual, 29-14.
Xavi Pascual agitó su banquillo en busca del quinteto propicio para entorpecer la marcha del Real Madrid. Deshaun Thomas lució sus buenas mañas de tirador con dos triples y la aparición de Oleson y Satoransky que estrecharon el marcador, 40-36 minuto 18.
La salida de la cancha de Llull secó la producción ofensiva de los blancos pero encontraron la vía interior. Los puntos de Bourossis, Ayón más la ayuda de un triple de Campazzo y un canasta acrobática del recuperado Sergio Llull sobre la bocina permitieron a los de Laso llegar con una cómoda renta al intermedio, 49-39.
En la reanudación se pudo apreciar un retazo cercano al baloncesto de ambos conjuntos cuando tengan más rodaje en sus piernas.
Volvió a aparecer el juego electrizante y meteórico del Real Madrid con una aportación coral de Sergio Rodríguez al timón y los sempiternos Llull y Rudy Fernández.
Se obcecó y atascó el Barcelona con los intentos desde la larga distancia, pero no era su día. Así los de Pablo Laso se despegaron con una máxima renta de 16 puntos, 69-53 en el minuto 27.
No encontró la manera de recortar esa distancia el equipo catalán que afrontó el cuarto final con doce puntos de desventaja, 71-59, y buscando una remontada imposible.
No hizo lo posible por buscar la voltereta en el marcador el conjunto de Xavi Pascual que bajó los brazos demasiado pronto y se dejó llevar hasta el bocinazo final con un intercambio de canastas.