Hola niñas y niños hoy va de monstruos, espero que no os asusteis mucho porque los que os muestro, miedo, mucho miedo, lo que se dice miedito, no dan. No voy a asustaros con el cuento de que vendrán los monstruos, eso está pasado de moda, es un cuento antiguo de las abuelas y de los abuelos. En realidad, estos monstruos provocan mucha risa, hacen la risión y hasta os podéis echar unas buenas carcajadas. ¡Vamos allá! ¡Sed monstruosamente bienvenidos!
En el mundo de Alberto, las niñas y los niños, poseen monstruos como animales de
compañía. Nosotros tenemos perros, gatos, loros, tortugas, peces, ratoncitos..... espero no dejarme alguno.
Pues bien, Alberto, nuestro protagonista, tiene a Sidney. Considera que es el mejor, el number one del mundo mundial y para que otros lo sepan también, ha decidido inscribirlo en el Concurso El mejor monstruo de Compañía del Mundo. Un programa muy popular emitido, hasta por televisión, donde se premian cinco categorías. A saber:
1. Verrugas más peludas
2. Altos Vuelos
3. El más pulgoso
4. El pedo más apestoso
5. Aliento más ardiente
En la primera categoría, los jueces empiezan a pasarlo un poco mal, trepan a lo alto de los monstruos con sus aparatos de medición, mientras los monstruitos lucen palmito y enseñan sus enormes coloridas y peludisimas VERRUGAS.
¡Hala! ¡ Menudos tamaños! ¡Y con pelazos! ¿Y los jueces? Uno se desmaya, una le sale un sarpullido, otro está a punto de vomitar, otra se marea.....
Pero cuando le llega el turno a Sidney, los jueces comprueban ojipláticos, patitiesos, patidifusos,turulatos, boquiabiertos ¡Que Sidney se ha dado su habitual baño con jabón y espuma en abundancia! ¡Ni tan siquiera tiene verrugas! ¡Solo unas graciosas pecas!
-¡Madre mía, qué bochorno!- piensa Alberto.
- Bueno en realidad solo estamos en la primera prueba. Además, ¿Quien quiere de mascota a un enorme monstruo peludo y plagado de verrugas?- se dice para si mismo.
En la segunda prueba, todo el mundo ha salido del teatro para admirar lo alto que pueden volar los monstruos. Los jueces usan globos aerostáticos y cintas métricas kilométricas para medir la altura de vuelo.
¡Hala, qué alto! ¡ Y qué viento!
¿Y los jueces? Uno se desmaya y otra sale volando cuando su globo sedescontrola....
¿Qué ha pasado con la mascota de Alberto? ¿Lo imagináis niños y niñas? Pues bien, Sidney sufre de vértigo. Por eso vuela muy muy muy bajito, tan a ras de suelo que, no ha despegado los pies del piso....
-¡Madre mía, qué bochorno!- piensa Alberto.
- Bueno, solo estamos en la segunda prueba. Además, ¿Quien quiere de mascota a un monstruo que se pasa el día revoloteando y chocando cada dos por tres?
En la tercera prueba, ¡A no, no, no, no, nooooooo....! A partir de aquí ya os corresponde a vostr@s saber que ocurrió a Alberto y Sidney. ¿Creeis que destacarán en alguna prueba? ¿Tendrá Sidney más pulgas que ninguno? ¿Será su pedo el más apestoso, maloliente, putrefacto, pestilente? ¿Qué me decís de su aliento? ¿Exhalará bocanadas de fuego?
Yo solo os digo que todos somos diferentes, destacamos en algunas cosas, algunas nos gustaría mejorarlas y otras que no somos muy habilidosos. Pero ¿quién dice que ser diferente no puede tener premio? Algunas veces se nos olvida valorar lo importante, la amistad, el cariño y el respeto.