Los seguidores del Islam han sufrido con la detención y posterior prisión de Mohammad Harrak otro golpe de cara a la opinión pública, a pesar de que Harrak no frecuentaba ninguna mezquita. La que se encuentra más cerca del domicilio donde fue apresado es el centro islámico Islas Baleares mezquita At-Tauhid, de Son Gotleu, a dos calles de donde fue detenido.
Su imán es Said Ed Derqaoui, de 36 años, que aterrizó justo hace una semana procedente de Holanda donde había estado los últimos siete años. «Hoy (por ayer) no he hecho ninguna referencia en los rezos a lo que ha ocurrido pero sí lo haré el viernes que viene», comentó a Ultima Hora. Este imán comentó que «me interesa divulgar un Islam medio, el que habla de la paz sin el más mínimo atisbo de violencia».
Por otra parte, la comunidad islámica de Manacor condenó este viernes en sus oraciones el radicalismo. Essaudy Shoul, presidente de la mezquita Alojuwa de Manacor, afirmó que «en el discurso de la oración nos referimos a lo que ha pasado en Palma para condenar el radicalismo. Las ideas que defiende el detenido en Palma son terroristas o criminales y no pertenecen al islam, que defiende la paz. Hechos como estos son tristes y nos perjudican como colectivo». Del mismo modo se expresó Mahmoud Elhirech, imán de la mezquita Attabshir wa Attaaouen de Manacor. «Condenamos el terrorismo en la mezquita, sobre todo si se produce un caso en un lugar tan cercano como Palma. Condenamos a todos los que se proclaman musulmanes pero que no lo son porque defienden la violencia y el terror, unos valores contrarios a nuestra religión», sentenció. La comunidad islámica de Inca se expresó en términos similares. Alahoui Mohamed, miembro de la asociación Asabre, indicó que el sustituto del imán (que se encuentra de viaje en La Meca) tuvo palabras contra el terrorismo en la oración del mediodía y reivindicó que la musulmana es una religión «pacífica». En sa Pobla, el presidente de la asociación islámica Ibno Mazigh, Bagdad Habdouti, sentenció que la persona detenida por sus presuntos vínculos con el yihadismo «no tiene nada que ver con nosotros» y le calificó de «enemigo nuestro».