El Govern quiere evitar que el alquiler turístico se convierta en el negocio de un grupo de inversores y para ello ha presentado enmiendas a su propia ley de alquiler vacacional –43 en total– para que un mismo propietario pueda alquilar un máximo de cuatro viviendas. Como ya se había anunciado, PSIB y MÉS, partidos que han presentado las enmiendas, también han propuesto que la vivienda habitual solo se pueda alquilar por un plazo máximo de 60 días al año.
Este lunes finalizaba el plazo para la presentación de enmiendas al proyecto de ley de alquiler turístico y los dos partidos que apoyaban al Govern han incorporado una serie de propuestas que derogan los aspectos más desarrollistas de la Ley de Turismo de Carlos Delgado, que ahora estaban en suspenso. Abren además la puerta a autorizar la ampliación de volumen de hoteles y oferta turística complementaria siempre que no implique un incremento de plazas y se hagan con criterios de sostenibilidad.
PSIB y MÉS esperan llegar a acuerdos con Podemos para que la ley entre en vigor este mismo verano. Si no consiguen el apoyo de Podemos, esperan pactar con otras formaciones. También deberá negociar el texto con los diputados de MÉS per Menorca, que hasta ahora daban apoyo al Govern, pero que, desde la crisis de los contratos, han abandonado el Ejecutivo. MÉS per Menorca ha presentado enmiendas para permitir el alquiler de habitaciones y para impedir todo tipo de alquiler en aquellas viviendas que tengan abierto un expediente de disciplina urbanística.
El PP, Ciudadanos y el PI han presentado enmiendas a la totalidad, lo que significa que piden al Govern que retire este texto y presente otro alternativo.