La Assemblea de Docents ha pedido instrucciones a la Conselleria d'Educació ante las altas temperaturas que se experimentan estos días en Baleares, y que han hecho rebasar los niveles máximos permitidos por ley en muchos centros educativos.
Según advierten desde la plataforma educativa, la temperatura que debe haber todo el año en la aula ha de ser entre los 17 y los 27 grados centígrados. Sin embargo tanto este miércoles como este jueves no pocos centros han superado los 30 grados.
Desde la Assemblea afirman que el Govern les recomienda «cerrar persianas, beber agua, y buscar aulas más frescas».
Por su parte, el sindicato Unió Obrera Balear (UOB) ha puesto a disposición de los docentes modelos de denuncia por temperaturas ilegales, que deben remitir a las direcciones del centro, a Inspecció de Treball y a la Dirección General de Treball i Salut laboral, con el fin de «cubrirnos las espaldas ante casos de problemas de salud derivados del calor en las aulas».
Cuando yo estudiaba en los años 80 hacia calor y el mismo frio, y ni calefacción y ni aire acondicionado. Más codos y a estudiar.