La particular forma de refrescarse de un niño, dentro de una piscina instalada en toda la superficie de un balcón en una localización sin precisar, y con la simple ayuda de una lona y una manguera, ha generado numerosos comentarios en las redes sociales tras ser compartido por miles de perfiles distintos a lo largo y ancho de Twitter.
No hace falta ser un experto ingeniero para considerar que esta opción no es demasiado recomendable. De hecho, algunos usuarios se dedicaron a realizar cálculos matemáticos a vuelapluma, que pretendían anticipar si ese balcón podría soportar la cantidad de agua almacenada, o bien acabaría cediendo por el peso excesivo.
Además de los cálculos y los comentarios físicos, también se han generado múltiples memes sobre esta curiosa escena.
Desde luego el calor deja a cero las escasas neuronas que tienen algunos...Lo de la piscina es la idea que les faltaba a los que especulan ilegalmente con sus viviendas en edificios plurifamiliares...Dónde se ha visto un parque temático que se precie sin todo tipo de atracciones? Qué triste futuro nos espera con este concepto de isla...