Més per Menorca ha denunciado que el Gobierno pretende inmiscuirse en las competencias propias del Govern, en lo que afecta a la Ley de Comercio y sobre la política lingüística de los establecimientos que impulsan los menorquinistas, para que, entre otras cosas, los horarios comerciales, los anuncios fijos de publicidad y las ofertas sean, como mínimo, rotulados o redactados en catalán.
Sin embargo, el Ministerio de la Presidencia y Administraciones Territoriales ha emitido un informe advirtiendo y recomendando que los anuncios y publicidad de los horarios comerciales deberían anunciarse «al menos, en castellano».
Desde Més per Menorca explican que la normativa ya existía en los términos que se pretenden recuperar antes de la entrada del PP de José Ramón Bauzá en el ejecutivo balear, y que «durante ese periodo los populares fueron eliminando los derechos lingüísticos de los consumidores y clientes. Ahora, la iniciativa parlamentaria busca recuperar aquellos derechos».
Añaden que el mencionado informe ministerial reconoce que los horarios comerciales son una competencia autonómica, aunque matizan que «sería conveniente cambiar el sentido de los artículos de la proposición de ley y de manera que la información que se ofrezca a los consumidores se realice al menos en castellano, por ser la lengua que todos los españoles tienen el deber de conocer y el derecho a usar».
El portavoz menorquinista en el Parlament, Nel Martí, remarca que «estas consideraciones no son más que una tozudez del Estado central, que desprecia la lengua catalana como lengua propia y oficial en las Islas, y la quiere arrinconar para hacerla lengua innecesaria. Es una forma con la que pretenden vigilar y controlar la actividad parlamentaria y la elaboración de leyes. De nuevo, el Estado demuestra no querer entender ni saber nada de las lenguas oficiales del Estado que no sean la castellana, la que priorizan e imponen por encima del resto».