«Tenemos que recordarle dos cosas (a la madame). Que le enseñamos muchas fotos y que recuerde que dijo que los sobres los recibía Mut, Torres, Estarellas y Vera (policías y comisarios de Palma). Y que no meta la pata con lo de A. (testigo proteguido)». Los wasaps del ‘caso Cursach' destapados en primicia por Ultima Hora revelan que el juez Penalva y el fiscal Subirán dirigían a los testigos claves de la causa sobre qué debían decir en sus declaraciones.
«M. (testigo protegida) debería recordar los reconocimientos de fotos de polis que hizo», escriben el 14 de junio de 2017. En otro wasap, los ahora investigados escriben sobre la declaración de otro testigo clave y abordan la detención de varios rumanos supuestamente a sueldo de Cursach: «Y hacéis constar que si no lo dijo ni en la denuncia ni en el juzgado fue por miedo a represalias de Marian y rumanos. Ole. Condena asegurada».
Enjaulado
En otros escritos entre un subinspector y el juez o fiscal, el responsable de la investigación ordena: «Si D. (testigo) declara esta tarde como os he dicho, lo detenéis enseguida». El policía le replica: «Descuida. Si no hoy, mañana duerme enjaulado». Acto seguido el primer interlocutor añade: «Pensad que si ha sido cosa de Adrian nos queda muy coja la vinculación con Cursach, salvo que vinculemos Marian, Adrian y Cursach. Ahora bien, si ha sido él pues mala pata y no lo cargamos».
En otra ocasión, en agosto de 2017, wasapean entre ellos sobre la llamada al 091 del polémico testigo protegido que denunció continuas agresiones y amenazas de los rumanos, y que el abogado Ignacio Herrero siempre sostuvo que eran falsas. «¿Has escuchado la conversación? lo digo porque en mi opnión no es recomendable enviarla», le comenta un subinspector a un agente raso del Grupo de Blanqueo. «¿Por qué?», se extraña el otro.
«La conversación no me gusta un pelo. No se deduce ni miedo ni temor ni percepción de nervios», explica, dudando de su propio testigo. Sobre otro testigo clave, son muy directos a la hora de asesorarlo sobre a qué policías locales debe señalar: «El trilero que diga que a la mayoría los conoce del trile del Arenal. Vatercillo, Más, el Conde, Vidal, etc...».
En otro chat, los ahora investigados siguen ‘dirigiendo' a sus testigos: «Que luego diga que recuerda a Garí y Llompart (dos de los policías locales imputados en la causa)». Durante una de las declaraciones, los nervios entre policías de Blanqueo, Penalva y Subirán están a flor de piel y se recriminan entre ellos: «Estoy harto, la estáis jodiendo. Se os oye todo. Le estáis soplando» (en referencia a las respuestas que debía dar otro de los testigos protegidos ).
Lo que no veo son las algaradas y muchedumbres habituales durante algunos casos sonados delante de los juzgados y en el callejón con rampa. ¿Porqué será?