El socialista Vicenç Thomàs presidirá el Parlament de la X Legislatura, que ayer inició su andadura y que es muy diferente a la anterior. Todo está marcado por la novedad: más caras nuevas que nunca (38), más grupos parlamentarios (8), más mujeres (27) y un reglamento nuevo. Thomàs (Palma, 1958), sin embargo, es un veterano de la política y ya hubiera podido ocupar ese cargo hace 4 años.
Vicenç Thomàs, en su primera intervención, defendió que la Cámara autonómica debe ser percibida como «la expresión de la pluralidad» de la ciudadanía y que él asume esa «responsabilidad». Además, se comprometió a que la Cámara «cumpla con sus obligaciones» de actividad legislativa y control político a la acción de gobierno.
Fue elegido con 32 votos: los de su partido, los de Més per Mallorca y Més per Menorca, Podemos y Gent per Formentera. Esos serán, previsiblemente, los votos que logre Francina Armengol cuando se celebre el pleno de investidura. Thomàs inició ayer mismo los trámites para llegar a esa sesión, llamando a los representantes de los diferentes partidos.
Gloria Santiago (Unidas Podemos) será la vicepresidenta primera de la Mesa; Juan Manuel Lafuente (PP), vicepresidente segundo; Joana Aina Campomar (Més per Mallorca), secreteria primera y Maxo Benalal (Cs), secretario segundo.
Variaciones
El pleno se inició a las diez y cuatro y la primera parte de la sesión estuvo presidida por la mesa de edad. El presidente fue el diputado de Unidas Podemos Pablo Jiménez que fue quien dirigió la votación para elegir la Mesa definitiva. Eran las once y media cuando Thomàs ocupó la silla de la presidencia de la Cámara y se inició el proceso de jura o promesa de la Constitución y el Estatut d'Autonomia.
La totalidad de representantes del PSIB optó por el «sí, prometo»; los del PP se dividieron entre el «sí, prometo» y el «sí, juro», lo mismo que los de Cs y el PI. Diputados y diputadas de Més, Podemos y Vox optaron por añadir coletillas. Esta decisión no provocó ningún tipo de controversia y el presidente de la Cámara dio por buenas todas las votaciones. Francina Armengol protagonizó una de las anécdotas ya que dijo «sí, prometo» antes de que le hicieran la pregunta.
Vox optó por «jurar por España» y así lo enfatizaron Jorge Campos, Idoia Ribas y Sergio Rodríguez.
Josep Castells y Patricia Font, de Més per Menorca, prometieron «desde la fidelidad al pueblo de Menorca y sin renunciar al derecho de autodeterminación»; Miquel Ensenyat (Més per Menorca) prometió «por imperativo legal», así como el diputado de este grupo Josep Ferrà, que añadió «sin renunciar al derecho de autodeterminación de los pueblos», igual que Joana Aina Campomar.
Podemos eligió varias fórmulas. Desde las clásicas, sin añadidos (así prometieron su cargo Juan Pedro Yllanes y Alejandro López, que se estrenan en la Cámara, como el resto de representantes de la formación morada) a las de Antonia Martí, Pablo Jiménez y Gloria Santiago. La primera –que fue concejala de Palma en el anterior Consistorio– , empleó una larga coletilla. Dijo que prometía «desde esta tierra acogedora desde la que lucharemos por acabar con las desigualdades sociales». Pablo Jiménez, añadió a «por imperativo legal», un llamamiento, «democracia y república». Gloria Santiago prometió «por la lucha feminista». Fue el guiño más evidente a esta causa en un Parlament con 59 escaños de los que 27 están ocupados por mujeres.
En las próximas semanas habrá cambios en el Parlament ya que, previsiblemente, algunos diputados y diputadas ocupen cargos y renuncien a sus escaños. Eso provocará la incorporación de otras personas de la lista en los grupos de la mayoría.