La apuesta actual de la sanidad en España pasa porque Atención Primaria sea el eje fundamental del Sistema Nacional de Salud. Para conseguirlo se ha hablado en innumerables foros de la importancia de dotar presupuestariamente esta partida. Las sociedades científicas recomiendan que se destine un 20 % de las cuentas sanitarias y el IB-Salut, en 2018, ya le dedicó un 24 %.
De los 1.550 millones de euros con que se dotó al Servei de Salut en 2018 se destinaron 363 millones de euros a Primaria. De éstos, 171,8 millones se destinaron a mejoras de contrato y personal, cuya plantilla se ha incrementado con 150 profesionales más, sanitarios o no sanitarios, en la última legislatura.
Además, desde el IB-Salut destacan la inversión realizada en tecnología e infraestructuras para mejorar «la capacidad resolutiva de Atención Primaria».
Los sindicatos sanitarios coinciden en aplaudir las cifras pero también solicitan una mayor planificación. «Se apuesta por hacer nuevos centros de salud pero no se acuerdan de que los que hay abiertos necesitan un gasto de mantenimiento», reconoce el delegado del Sindicato de Enfermería (SATSE) de Atención Primaria, Pep Jaume. «Se parchean las cosas para salir del paso pero no se da una solución definitiva. Hay centros de salud con máquinas de aire acondicionado obsoletas que cada año fallan», recuerda.
Desde UGT hablan de una falta de eficiencia. «La Atención Primaria es una gerencia con mucho volumen y necesita un presupuesto acorde que en muchos casos no se refleja, como es en el mantenimiento. No le demos normalidad a lo que no es normal», señala Aurora López, secretaria de Salud del sindicato. Por otra parte señala que los centros de salud no están al 100 % de la contratación. «En verano hay más población y menos personal».
Precisamente en el incremento de plantilla pone el acento el Sindicato Médico. «Pueden hacer centros de salud nuevos pero como no clonen a médicos...», sugiere su presidente, Miguel Lázaro. Los médicos también reconocen el esfuerzo presupuestario y piden continuidad. «Ahora toca mantener la medalla», afirman. Desde el Sindicato de Enfermería añaden que «todos los recursos son pocos porque Atención Primaria también está asumiendo nuevas tareas».