La consellera de Administracions Públiques, Isabel Castro, ha explicado este viernes tras la reunión del Consell de Govern el decreto ley aprobado por el Ejecutivo balear que regula las sanciones por incumplimiento de las normas establecidas para garantizar la contención de la epidemia de COVID-19.
Las sanciones se dividen en leves, graves y muy graves.
En el caso de las leves, las sanciones pueden llegar hasta los 3.000 euros de multa; en el caso de las graves, hasta 60.000, y en el caso de las muy graves, hasta 600.000 euros. En este último caso estaría la comercialización de fiestas que impliquen un riesgo para la salud por promover aglomeraciones.
El cierre del establecimiento o local que incumple las normas está previsto en la resolución, además de la multa.