La muerte por COVID del empresario Joan Ripoll, de 59 años, responsable de Relaciones Institucionales de Eroski y miembro de la patronal Afedeco, ha causado un hondo pesar entre sus familiares y compañeros de trabajo, así como en la CAEB.
Trabajó durante más de 20 años a favor del comercio de proximidad y jugó un papel esencial en la empresa Eroski, además de ser uno de los firmes promotores de la Fundación Impulsa, gestada desde la CAEB para mejorar la competitividad de Balears.
Ripoll fue un empresario muy sensibilizado con el asociacionismo y se le considera un referente en esta materia, especialmente desde la patronal Afedeco, donde tuvo un papel clave en sus orígenes.