El sindicato ANPE ha denunciado que «la población todavía no está vacunada en su totalidad y no deseamos que el profesorado ni los padres de alumnos pasen otro verano con incertidumbres».
En este sentido, el sindicato destaca que «los equipos directivos y los docentes no merecen pasar un mes de julio reuniéndose y planificando sin unas directrices concretas y sin unos criterios claros que debe aportar la Administración. Es imprescindible dar a conocer el escenario que estudia la Conselleria d'Educació para poder planificar el próximo curso escolar con garantías educativas y sanitarias».
En una reunión con la Conselleria, ANPE ha expuesto «la extensión de las jornadas laborales del profesorado, que son interminables y están llegando al agotamiento de nuestros docentes. Las causas de esta extenuación son debidas al escenario B de semipresencialidad, que requiere un sobreesfuerzo y una dedicación exclusiva de nuestros profesionales. Las jornadas laborales no deben ser extenuantes».
ANPE ha propuesto que la Conselleria decida las directrices de planificación para el próximo curso en mayo, antes de finalizar el actual año académico, «para poder dotar a los centros de los funcionarios e interinos docentes necesarios, permitiendo unas ratios que deberían mantenerse bajas por motivos de precaución sanitaria. También hemos exigido recursos económicos para cubrir las sustituciones, que este año han funcionado muy bien y no debemos permitir dejar ningún alumno sin su profesor».
Para el sindicato, «también es importante considerar la retirada del marcaje horario, que tan sólo demuestra que el profesorado cumple con sus horarios mucho más allá de lo que le corresponde. Igualmente pedimos unas pautas comunes de promoción y titulación para todos los centros educativos, de manera que todos los equipos docentes de los diferentes centros tengan instrucciones homogéneas, y que se garantice la atención al alumnado de necesidades especiales».