Las reservas hídricas de Baleares se situaron en junio en un 54 %, un punto por debajo del mes pasado y 18 menos que en 2020, cuando estaban al 72 %, según datos de la Conselleria de Medio Ambiente y Territorio.
Dichos datos ponen en evidencia que las unidades del Pla de Mallorca y de Ibiza se mantienen en escenario de prealerta.
Escenario actual de las zonas de sequía en Baleares.
A pesar de esta diferencia de 18 puntos, los resultados se asemejan a los de hace dos años, en 2019, cuando las reservas estaban al 55 %.
Por islas, la situación mejora en Menorca, donde sube con respecto al mes anterior del 51 % al 54 %, y en Formentera, donde se incrementa un punto, situándose en el 47 %. En Ibiza los resultados se mantienen con un 51 %, mientras que en Mallorca bajan del 55 % al 54 %.
En cuanto a las unidades de demanda, no hay cambios con respecto al mes anterior. El Pla e Ibiza se mantienen en escenario de prealerta, por lo que necesitarán tres meses en situación de normalidad para cambiar de escenario. Si no hay recuperación, las de Migjorn, Tramuntana Nord y Formentera podrían entrar en prealerta en julio y Arta en agosto.
Según datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), junio ha sido húmedo en las Baleares. Se acumularon de media 27,6 litros por metro cuadrado, más del doble del que es habitual. En cuanto a las temperaturas, ha sido un mes cálido.
En Mallorca el mes ha sido muy húmedo, con 28,5 litros por metro cuadrado y en Menorca, con una media de 38,7 litros por metro cuadrado. En las Pitiüses se han registrado 12,8 litros por metro cuadrado.
A pesar de las altas precipitaciones, el déficit hídrico interanual se mantiene en todas las islas, según Medioambiente. En el conjunto del archipiélago, presenta un 15 % respecto a la media histórica. En las Pitiüses, es del 24 %; en Mallorca, del 15 %, y en Menorca, del 13 %.