Esta sexta ola de la pandemia no deja de ofrecer datos espectaculares en cuanto a la cifra de contagios. El recuento del pasado viernes se saldó con 4.286 nuevos positivos, el segundo récord diario después de la cifra alcanzada el miércoles de esta misma semana; según el visor estadístico de la Conselleria de Salut.
Del total de personas contagiadas en las Islas 3.206 corresponden a Mallorca, mientras que la positividad se sitúan en el 37,3 por ciento.
Durante la jornada de este sábado continuaron las largas colas en los distintos centros de vacunación, destacando el ubicado en el antiguo hospital de Son Dureta, donde la afluencia de personas que acudieron para completar la pauta de vacunación o realizar las pruebas PCR hizo que la cola saliera del recinto y se extendiera por las calles próximas.
En estos momentos el 89,5 por ciento de la población diana de Balears ya ha completado las pautas de vacunación señaladas, mientras continúa la administración de la tercera dosis y la de los menores.
Por otra parte, la patronal de las pequeñas y medianas empresas, PIMEM, emitió este sábado un comunicado en el que aseguraba que las bajas laborales acumuladas el pasado mes de diciembre superó la cifra de diez mil, «tres mil más de las cifras publicadas». Sobre esta circunstancia se añade que los sectores del comercio, la industria o la restauración «ven afectadas sus cuentas de resultados por la falta de mano de obra».
El presidente de PIMEM, Jordi Mora, reconoce que en muchos casos las bajas no se tramitan «porque muchos trabajadores pasan la COVID con síntomas leves o de manera asintomática, lo cual confirma que las vacunas están funcionando y entre todos estamos intentando readaptarlos a la situación» e incorporando el teletrabajo cuando es posible esta opción.
Mora señala que el impacto económicos en todos los sectores empresariales ha sido importante, y destaca de manera especial en el de la restauración por las cancelaciones de las reservas, aunque se mantiene esperanzado de que «después de Sant Sebastià y Sant Antoni vayamos recuperando la normalidad».
Por último, PIMEM reconoce que ni el sector privado ni el público está preparado para operar con cifras de bajas laborales tan elevadas, «tratamos de sobrevivir como podemos a esta situación», concluye el presidente de la patronal.