En octubre de 2021, la Conselleria balear de Salud tramitó 862 altas laborales por COVID; dos meses después, tras la irrupción de la variante ómicron en diciembre, se gestionaron 7.900. Del 1 al 20 de enero ya sumaban 14.817. «El aumento es tan explosivo que todavía hay que dar salida a las atrasadas», explica la directora asistencial del IB-Salut, Eugenia Carandell. «Quedan unas 12.000 peticiones por terminar de resolver», reconoce.
Desde este viernes, la web covid.ibsalut.es está activa también para formar parte de la solución. En este portal de internet ya es posible pedir cita para hacerse un test de antígenos en los puntos habilitados; señalar quienes son los contactos estrechos de un positivo, y ahora también pedir la baja laboral con un sólo click.
¿Cómo funciona? La persona que quiera solicitar una incapacidad temporal debe hacerse la prueba diagnóstica en Son Dureta, en un centro de salud, en un centro sanitario privado o en una farmacia adherida a una nueva plataforma, que se pondrá en funcionamiento y se presentará el próximo lunes.
«Las pruebas que se hacen en casa no servirán porque el IB-Salut debe atestiguar legalmente que la persona está enferma. Para eso la prueba debe supervisarla algún tipo de personal sanitario», explica Carandell.
En la web hay que dar los datos personales y añadir dónde se ha validado el test positivo. Con este trámite el interesado recibirá, de forma automática, un correo electrónico con el justificante sanitario que ya se puede presentar a la empresa.
Cuando el personal de Inspección Médica reciba la petición, cotejará dónde se ha hecho el test en su base de datos y, al aprobar la baja, el paciente recibirá un SMS de confirmación.
«Queremos dar una respuesta integral, que ayude a controlar a los pacientes asintomáticos o con sintomatología leve, resolviendo los problemas cotidianos que les supone ser positivo», explicó la responsable. Y es que de los casos activos este viernes, apenas un 0,7 % estaba hospitalizado.
Si se necesitan más días
Las bajas otorgadas por la vía digital se acompañarán de un alta a los siete días, que es el tiempo estipulado por salud pública para estar aislado. «Si a los cinco todavía tienen síntomas o existe algún otro motivo por el que haya que alargar el alta, existe un teléfono especial donde explicarlo y solicitarlo», añade Carandell.
«Pensamos que será una gran ventaja porque la mayoría de los contagios son de gente joven, sin síntomas, a quien le preocupa más la burocracia. Ellos saldrían del sistema sanitario para que éste pueda seguir atendiendo a los que no están bien», advierte. La web recoge además todos los consejos de salud sobre la COVID-19.
Colectivos de riesgo
En el caso de personas mayores de 70 años, embarazadas, no vacunados, o enfermos con una patología que baja las defensas o toman inmunodepresores también hay un apartado en la web donde pueden apuntarse para recibir un seguimiento clínico.
Además, el teléfono Infocovid, cuya actividad pretende alviarse con este sistema, también estará disponible para los más vulnerables. «Y si alguien empeora que llame a emergencias o al 061», recuerda Eugenia Carandell.
Para afrontar tan «impresionante» demanda de bajas laborales, a la que «no hemos podido darle salida», el IB-Salut también ha incrementado la capacidad del servicio de Inspección Médica que, además de sus seis médicos, contará con un refuerzo de ocho facultativos jubilados para llevar el día a día de las peticiones. La plantilla podrá atender así los atrasos.