Las compañías aéreas europeas tienen programados 44,4 millones de asientos en Baleares para este verano, un 10,6 % más respecto a la 2019, según dio a conocer ayer el presidente de la Asociación de Líneas Aéreas (ALA), Javier Gándara.
«Las Islas lideran el crecimiento y la recuperación turística este verano en España por la gran demanda que hay para viajar en los principales mercados emisores europeos», apuntó Gándara. Al mismo tiempo destacó el aumento de asientos respecto a otros enclaves vacacionales españoles «lo que sitúa la demanda en los niveles previos a la prepandemia».
ALA reiteró su petición de que se refuerce la dotación policial en los controles de pasaportes de los aeropuertos con gran tráfico internacional procedente del Reino Unido, como son Son Sant Joan e Ibiza, «ya que la congestión se traduce en un perjuicio para los pasajeros, tanto nacionales como internacionales, en forma de retrasos o pérdida de vuelos o conexiones en nuestro país. Solamente esta Semana Santa más de 3.000 personas perdieron su conexión sólo en Madrid- Barajas a causa de las largas esperas producidas en los filtros fronterizos a causa del `Bréxit`, situación que se puede repetir en Baleares».
Gándara mostró, asimismo, su preocupación porque estas previsiones tan optimas para la temporada de verano, de abril a octubre, se distorsionen por la congestión en el espacio aéreo francés. Así, explicó que al cambiar en Francia el sistema operativo de control aéreo (ATC) en el centro de Reims este mes y desviarse todo el tráfico con dirección a Baleares al centro de control de Marsella, según Gándara «se producirá una saturación aérea que afectará de manera especial a los aeropuertos de las Islas durante todo el verano, lo que provocará grandes retrasos».
Las aerolíneas para minimizar este impacto «van a posicionar aviones de reserva para evitar una mayor acumulación de retrasos», señaló Gándara.