Una mujer ingresó ayer en prisión para cumplir una condena de 12 años y medio de cárcel por torturar y violar a una prostituta en Llucmajor. La acusada se encontraba en busca y captura y la Policía Judicial de la Guardia Civil la localizó y la trasladó al centro penitenciario de Palma.
Los hechos ocurrieron en marzo de 2016. La mujer y su novio contrataron a la víctima, de 49 años, en la Porta de Sant Antoni y se dirigieron a una casa de Llucmajor. La prostituta, que ya había tomado drogas, consumió alcohol. Los acusados, mientras mantenían relaciones con la víctima, le introdujeron un objeto de forma agresiva en la vagina y el ano. La mujer sufrió graves lesiones y la operaron de urgencia. Estuvo cinco días ingresada en la UCI y permaneció 53 en el hospital. Los médicos tuvieron que operarla para reconstruir el tránsito intestinal.
Los dos acusados, en el juicio, negaron haber torturado a la mujer y afirmaron que las lesiones se las hizo ella misma introduciéndose una botella en la zona genital. Los médicos que examinaron a la víctima y los forenses aseguraron que esa versión era imposible. La Audiencia condenó al hombre a 14 años de prisión y a que indemnizaran a la víctima con 84.000 euros.