Dos menores que supuestamente habían sido víctimas de abusos sexuales por parte de su padre se han retractado de sus acusaciones. Lo han hecho este jueves durante el juicio celebrado en la Audiencia de Palma donde las menores han relatado que todo fue una invención de la pareja por aquel entonces del padre que las obligó a «aprender todo el monólogo» de los abusos. Sin embargo, las forenses que han participado en el juicio han manifestado que creen que la versión que explicaron las niñas en la denuncia era verídica y que ahora podrían estarse retractando por miedo a las consecuencias de todo lo ocurrido. La Fiscalía, en base a las declaraciones de las terapeutas, ha decidido mantener la petición de 27 años de prisión. La defensa del acusado, tras la rectificación de las menores, ha solicitado la absolución.
El padre, ha negado este jueves todas las acusaciones durante su declaración y ha apuntado a que su relación con las menores se deterioró cuando él inició una relación con la niñera. Una mujer, que según la madre de las niñas, llegó a darle una paliza en una ocasión. «Yo era el que estaba en medio de una guerra que desconocía, las denuncias me llegaron de repente».
En la nueva versión de las menores, la hija mayor del acusado ha rectificado todo lo expuesto en las declaraciones previas y ha dicho que la pareja de su padre no quería que estuvieran con ella. «Nos dijo que lo contáramos. Nos hizo aprender el monólogo este de los abusos y todo esto. Me había amenazado con que me fuera. Todo lo de los abusos era una mentira. Nuestro padre nunca vio pornografía, ni nos tocó ni nada». La menor también ha explicado que hace dos años le contó a su madre que todo era mentira. «Esa mujer (haciendo referencia a la pareja de su padre) no nos trataba bien y yo no sabia que hacer», ha concluido. Por su parte, la hija pequeña del procesado también ha rectificado su versión y ha dicho que lo que contó en los juzgados «no era verdad». «Su novia nos dijo que lo dijéramos, nos lo estuvo explicando y nosotros lo dijimos», ha apuntado.
Posteriormente tres terapeutas que también han declarado en el juicio han ratificado sus informes forenses donde valoraron que se trataba de un relato válido y no inducido. Según estas profesionales, el relato de las menores cumplía los criterios de credibilidad y no se trataban de testimonios aprendidos «Realmente estas niñas no quieren perjudicar a su padre, solo quieren protegerse a ellas», ha dicho una de las forenses.