La ayuda balear al pueblo marroquí ya está de camino. Cinco voluntarios y dos perros de rescate del Grupo Balear de Rescate viajan a Marruecos para ayudar a rescatar supervivientes, días después de que se produjera un terremoto de magnitud 7 en la escala Richter registrado en la provincia de Al Hauz.
La expedición integrada por Bomberos de Ibiza, junto con varios agentes de la Policía Local de Palma y otros municipios de la Isla, está previsto que se una al resto del contingente español de rescate, está previsto que se una al resto del contingente español de rescate que participará en las labores de ayuda al país vecino tras la tragedia natural sufrida.
A las 16 horas de este domingo, Manuel, Moisés, Antonio y Maikel embarcaron junto a ‘Mica', la perra especializada en búsqueda de personas en el buque de Balearia. «Vamos a cubrir la ruta Malloca-Denia. Una vez allí, nos juntaremos con los compañeros bomberos llegados de Ibiza y con el resto del contingente español. Conduciremos hasta Sevilla, Algeriras y llegaremos a Marruecos. Nuestro enlace con el consulado ya tiene arreglada nuestra documentación y autorizaciones de entrada al país vecino y está previsto que nada más llegar nos pongamos a trabajar. Hay que recordar que a medida que avanzan las horas las posibilidades de encontrar supervivientes disminunyen», apunta Manuel Sánchez, presidente de la asociación y agente de la Policía Local de Palma.
Los mallorquines ya estuvieron en Turquía y Ucrania. El Grupo Balear de Rescate son expertos en salvar vidas. Su última expedición fue en Ucrania donde tuvieron que trabajar de forma incansable en la búsqueda de superviviente en los primeros meses de conflicto. También formaron parte del contingente español y Europeo de ayuda en el terremoto de Turquía. En principio, los mallorquines permanecerán en Marruecos hasta el próximo sábado.
«Nada más producirse la catástrofe ya nos pusimos a trabajar en el viaje y solicitar las correspondientes autorizaciones. Queremos agradecer de una forma muy especial a la Fundación Balearia, a la Asociación Internacional de Policía, Aldalmo y a Grúas Brocal (Calvià) su colaboración altruista. Todos los integrantes del grupo de rescate somos voluntarios y nos cuesta dinero prestar nuestra ayuda. Pero la satisfacción de salvar vidas no tiene precio», apuntan los miembros de la asociación. Uno de los integrantes tuvo que volar ayer por la mañana a Barcelona para sacarse el pasaporte y regresar unas horas después para poder viajar. Todo ello, pagado de su propio bolsillo. La expedición no recibe ninguna subvención y todos los gastos son sufragados de dotanivos propios y privados.