El sindicato Solidaridad (ligado a Vox) cuenta en estos momentos con 390 afiliados en Baleares pero espera que «miles de personas» de las Islas se sumen al paro general convocado para este viernes 24 de octubre en contra de la «presunta desigualdad» que generará para los trabajadores el pacto de investidura firmado por el PSOE, PNV, ERC, Junts, BNG, Coalición Canaria y Sumar. «España atraviesa el momento más crítico y convulso de su historia reciente. Nuestra Patria se encuentra en riesgo de ruptura por las cesiones del PSOE a todos los partidos separatistas, golpistas y filo- terroristas, enemigos declarados de España», dice la convocatoria.
«Desde el sindicato Solidaridad hemos adoptado la decisión de seguir apoyando como venimos haciendo todas las movilizaciones que se produzcan en contra de los citados pactos y convocamos una huelga general el próximo 24 de noviembre para expresar el contundente rechazo a las políticas de recortes sociales, supresión de derechos laborales y la desigualdad de los trabajadores que se producirán al amparo de las cesiones al separatismo y a quienes quieren romper la unidad e España», añade.
Todas las escuelas e institutos de Baleares, sean públicos, privados o concertados, deben permanecer abiertos este viernes 23 de noviembre, día en el que el sindicato Solidaridad ha convocado huelga general.
Con dos años de historia y 390 afiliados en Baleares Solidaridad no puede concretar cuántos trabajadores secundarán su convocatoria ni tan siquiera estimar la incidencia que tendrá la huelga sobre los centros educativos de las Islas. «Somos un sindicato pequeño que no tiene la estructura que tiene la UGT y obtendremos los datos este viernes a través del Ministerio de Trabajo, pero lo que tenemos claro es que a nivel educativo es abrumadora la cantidad de alumnos que nos han escrito para hacer huelga, también en Baleares», afirma un portavoz sindical.
Este jueves ni la Conselleria d'Educació ni los sindicatos mayoritarios de la educación en Baleares (STEI y ANPE) supieron indicar cuántos docentes se han adherido a la jornada de huelga ni el número de centros educativos que se verán afectados. Aunque evitan pronunciarse públicamente sobre una huelga que mayoritariamente no comparten, fuentes sindicales creen que tendrá «poca incidencia» en las aulas de las Islas. A lo largo de la jornada del viernes los directores de los centros educativos facilitarán a la Conselleria, a través del Gestib, la información referente al seguimiento de la huelga y cualquier posible incidencia.
Los servicios mínimos decretados por el Govern y publicados el pasado martes establecen que, además de los directores y secretarios de los centros, como mínimo deberá haber un educador infantil por cada tres aulas en los centros educativos de 0 a 3 años, un docente por cada tres aulas en las escuelas infantiles de 3 a 6 años y un docente por cada tres unidades de infantil y por cada cuatro de primaria en los centros que imparten educación infantil y primaria. Los centros de educación especial también deberán tener al menos un docente por cada tres unidades. En la enseñanza secundaria los requisitos son similares (un docente por cada cuatro aulas).
Los directores de todos los centros educativos deberán garantizar la apertura de las instalaciones durante toda la jornada escolar y que todo el alumnado que acuda al centro sea correctamente atendido. También deben garantizar que todo el personal que no secunde la huelga pueda desarrollar su actividad con normalidad. Tienen además la obligación de controlar la asitencia al trabajo y velar por el cumplimiento de las normas de organización y funcionamiento. Los directores designarán nominativamente o por sorteo público los profesores que deben garantizar los servicios mínimos, preferiblemente entre aquellos que hayan manifestado su voluntad de no participar en el paro.