La Policía Nacional ha sancionado con 10.000 y 15.000 euros dos vecinos de Llucmajor (Mallorca) por empadronamientos fraudulentos, al empadronar a 65 personas en dos viviendas, 37 en una y 28 en un estudio con una habitación.
Según ha informado la Jefatura en una nota de prensa, la Ucrif ha impuesto una multa de cerca 15.000 euros a un vecino de Llumajor, que fue investigado a raíz de una información que facilitó el Ayuntamiento.
La investigación concluyó que el hombre había autorizado el empadronamiento de 37 personas, de origen marroquí, la mayoría de ellas en situación irregular. Según han señalado, los empadronaba argumentando que era para hacerles un favor.
Por otra parte, la Ucrif ha multado con 10.000 euros a un hombre de Arenal-Llucmajor que también fue investigado. Según la Ucrif, el vecino había empadronado en un estudio de una habitación a 28 extranjeros subsaharianos, muchos de ellos en situación irregular.
El hombre reconoció que la gran mayoría de ellos nunca habían residido en el estudio y que autorizó su empadronamiento para ayudarles, ya que sin el certificado de empadronamiento no tienen acceso a la sanidad pública, tarjeta ciudadana y servicios sociales.
Según la Policía, cada día es mayor la cantidad de información que recibe la Brigada de Extranjería de Palma sobre empadronamientos fraudulentos de extranjeros que nada más llegar a Mallorca buscan empadronarse en cualquier vivienda. En muchos casos, bajo la cobertura de una habitación realquilada por especuladores que obtienen beneficios económicos aprovechándose de la desesperación de los inmigrantes.