Un hombre ha aceptado este viernes una condena de cuatro años y seis meses de prisión y una multa de un millón y medio de euros por tráfico de drogas tras admitir en la Audiencia Provincial que en un cacheo se le intervinieron 20 kilos de drogas y que, además, almacenaba otros 60 kilos de sustancia estupefaciente.
El juicio iba a celebrarse este viernes en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial pero el ahora condenado ha llegado a un acuerdo con el fiscal, que reclamaba inicialmente una pena de seis años de privación de libertad.
Los hechos se remontan a julio de 2024, momento en que el hombre se venía dedicando al tráfico de drogas, especialmente cannabis y cocaína. El procesado estaba en prisión provisional desde entonces.
Fue en un cacheo policial en un aparcamiento en Palma cuando los agentes hallaron en su poder dos bolsas con 20 kilos de resina de cannabis y 300 gramos de cocaína.
El hombre fue detenido y en un registro posterior en un trastero se hallaron otros 65 kilos de resina de cannabis. Toda la sustancia intervenida tenía un valor en el mercado ilícito superior a los 600.000 euros.