El pleno del Parlament ha aprobado este miércoles la Ley de gestión y modernización de las áreas de promoción industrial con los votos favorables de PP, Vox y los diputados no adscritos y las abstenciones de la izquierda.
La norma, sacada adelante por PP y Vox, busca fomentar el asociacionismo empresarial puesto que, según ha señalado el conseller de Empresa, Empleo y Energía, Alejandro Sáenz de San Pedro, de los 53 polígonos que hay en Baleares, «muy pocos» cuentan con asociaciones que velen por la coordinación de las empresas para aportar valor y para generar oportunidades de mejora.
Igualmente, ha subrayado que uno de los «grandes valores» de la normativa es, a su parecer, que es una ley «flexible, que da herramientas, no genera obstáculos y no impone». «Permite que cada polígono encuentre el modelo de gestión que mejor se adapte a sus necesidades», ha resumido.
El objetivo de la ley es regular el establecimiento de medidas dirigidas a alcanzar la modernización y la correcta gestión de las áreas de promoción industrial del territorio y establece, entre otros, el Plan Autonómico para la Competitividad y medidas para el impulso de la colaboración público-privada.
Por unanimidad, el texto ha incorporado una enmienda de MÉS per Mallorca para introducir una disposición adicional a la ley de proyectos industriales estratégicos que establezca que en los proyectos de energías renovables solo se aplique la ley en los destinados a abastecer energéticamente un proyecto de industrialización o modernización de una actividad industrial.
Con esta enmienda, según han celebrado los ecosoberanistas, la ley de proyectos industriales estratégicos dejará de ser «un colador» de parques solares en rústico.
La diputada de Vox Manuela Cañadas ha defendido la necesidad de «eliminar dogmas climáticos» en la ley a través de la única enmienda viva de la formación relativa a derogar cualquier norma referente a la implantación de políticas climáticas, que ha sido rechazada por la Cámara.
Según Cañadas, el «obstáculo real» es la «ideologización» normativa en materia climática, urbanística y burocrática. «La enmienda es una llamada de atención para que no se olviden de la raíz del problema», ha señalado, pidiendo al PP que «elimine el rastro de la izquierda».
El 'popular' Jordi López ha puesto en valor la cantidad de enmiendas introducidas en el texto durante la tramitación parlamentaria. «Además de aprobar una ley importante para el futuro industrial, este Parlament demuestra que cuando hay voluntad política, el diálogo y la colaboración de los grupos es posible y hay resultados», ha destacado.
LEY «MAL TRABAJADA»
Los grupos de la izquierda han criticado que la ley presenta «incongruencias e incoherencias» y que, además, «la falta valentía y se queda corta». Según MÉS per Mallorca, Més per Menorca y PSIB, la ley está «mal trabajada» y entró al Parlament «mal redactada».
«Me da la sensación que hay alguien que no ha hecho el trabajo que tocaba hacer de seguimiento de la ley», ha dicho el diputado menorquinista, Josep Castells.
Igualmente, los diputados Ferran Rosa (MÉS) y Marco Guerrero (PSIB) han hecho referencia a incongruencias en el texto, entre otras, que hace referencia a un tipo de colaboración que luego fue eliminada vía enmienda de Vox.
También han criticado la eliminación de una Comisión para la Competitividad de las Áreas de Promoción Industrial, también con una enmienda de los de Santiago Abascal. «Crean conceptos nuevos sin definir qué son», ha alertado el ecosoberanista.
ELIMINACIÓN DE LAS ENMIENDAS DEL PSIB
Durante la tramitación parlamentaria de la ley de polígonos se introdujeron varias enmiendas socialistas, con el apoyo de Vox, para establecer mecanismos de control en los casos en los que los presupuestos autonómicos se prorroguen.
Los de Santiago Abascal habían votado a favor de dichas enmiendas durante la ponencia, cuando todavía no había acuerdo presupuestario, una situación que provocó críticas del Govern y de los 'populares' al considerar que «bloqueaban» unos 400 millones de euros.
Finalmente, tras el acuerdo entre PP y Vox, estas dos formaciones han votado en contra de las disposiciones finales terceras bis, ter, quater, quinquies y sexies.
También se ha retirado del texto el artículo 29 que, entre otras cuestiones, establecía el fomento del uso de la energía renovable en las áreas industriales.
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