La Conselleria de Agricultura, Pesca y Medio Natural del Govern ha expresado su rechazo y preocupación ante la disminución del presupuesto de la Política Agraria Común (PAC) 2028-2034, que ha calificado de «alarmante», y ha advertido que supondría «un golpe muy duro» para el sector primario de Baleares.
Así se ha expresado el conseller del ramo, Joan Simonet, tras conocer la propuesta de la Comisión Europea para el nuevo marco financiero plurianual (MFP), que recorta en al menos un 20 por ciento la asignación de la PAC, ya que la rebaja de 380.000 millones a un mínimo de 300.000 millones.
Simonet ha advertido que la reducción supondría «un golpe muy duro» para el sector primario de las Islas, que ya se ve afectado por unas condiciones «especialmente complejas» derivadas de la insularidad y las consecuencias del cambio climático.
En este sentido, según ha expuesto su Conselleria, Simonet ha lamentado que la propuesta planteada por la Comisión Europea «no solo representa un retroceso económico, sino que desvirtúa la esencia de la PAC, ya que queda reducida a un simple apoyo a la renta condicionado al cumplimiento de buenas prácticas medioambientales».
A su parecer, lo «más grave» no es solo la reducción presupuestaria, sino el «desmantelamiento» de la Política Agraria Común como política propia y estratégica de la Unión Europea.
En Baleares, los fondos de la PAC suponen cada año en torno a 47 millones de euros, una cantidad «esencial» para la viabilidad de las explotaciones agrarias y pesqueras. En caso de confirmarse esta reducción presupuestaria, ha advertido el conseller, podría suponer una pérdida de hasta 15 millones de euros anuales.
Igualmente, ha remarcado que estos fondos no son solo fundamentales para el pago de ayudas básicas y directas, sino también para proyectos de modernización de regadíos, incorporación de jóvenes al campo o ayudas a explotaciones agroalimentarias, entre otras líneas de actuación.
«Estos cambios presupuestarios y de estructura de la PAC ponen en riesgo la viabilidad de nuestro sector primario y el futuro de nuestros agricultores y pescadores», ha agregado Simonet, quien ha insistido en que el sector agroalimentario y pesquero balear es esencial para la seguridad alimentaria y el mantenimiento del paisaje y la biodiversidad.
Además, ha considerado que «no se puede entender una Unión Europea cohesionada» sin una PAC «fuerte, justa y dotada de recursos suficientes». «Desmantelarla es un error que compromete el futuro de todo el sector», ha afirmado.
Así, ha subrayado que el Govern continuará defendiendo «con firmeza» los intereses de los agricultores, ganaderos y pescadores y, por ello, ha hecho un llamamiento a la unidad institucional y, junto al propio sector, para hacer un frente común de oposición a esta propuesta y trabajar para garantizar una PAC que «responda a las necesidades reales del sector».
El Ejecutivo autonómico trasladará en los próximos días su preocupación y desacuerdo, mediante una carta, al comisario europeo de Agricultura y Alimentación, Christophe Hansen. También se pone a disposición del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y del resto de comunidades para trabajar de manera conjunta y reivindicar una «oposición firme» ante la Comisión Europea.
«Nos jugamos mucho todos. Está en juego el futuro de miles de familias. Está en juego el futuro de nuestro sector primario», ha concluido Simonet.