«Sigo buscando los puntos conflictivos sobre Colón, como este de la toponimia, que nunca se había estudiado con tanta profundidad». Con estas palabras resumió Nito Verdera la intención que le ha llevado a escribir «De Ibiza y Formentera al Caribe: Cristóbal Colón y la toponimia», obra que acaba de aparecer en el mercado y que hace ya la sexta que el periodista e investigador ibicenco dedica a la figura del almirante para demostrar que era de origen ibicenco. Y no será el último, pues «para rastrear la familia Colom que había en Eivissa en el siglo XIV, que eran síndicos jurados de la antigua universidad y hombres de negocios, tengo que hacerlo de forma indirecta, como ahora con la toponimia, que es una de las cosas fundamentales, porque los nombres no se inventan». «Es que la documentación ha desaparecido; no hay siquiera los protocolos notariales ni las capitulaciones matrimoniales de la iglesia», añadió.
Un trabajo minucioso en el que Nito Verdera, colaborador de Ultima Hora Ibiza y Formentera , ha analizado los «197 nombres que Colón puso en los cuatro viajes; de ellos, 21 corresponden a Eivissa y Formentera». Más pruebas, pues, para avanzar en su teoría: «que era un súbdito de la Corona de Aragón y que, por descontado, era catalanoparlante». Por eso le gustaría que «algún filólogo, oficialmente y por el Institut d'Estudis Catalans, se pronunciase sobre algo que ya es seguro».