Antonio Gades ha vuelto al Ballet Nacional de España, del que fue su fundador y director durante dos años, para montar y rescatar con sus bailarines una de sus más aclamadas coreografías, «Fuenteovejuna», cuyo estreno será en Japón este año, antes de su posterior presentación en España.
El pasado día 2 Antonio Gades, que en 1978 asumió la dirección del entonces denominado Ballet Nacional Español, cargo en el que fue sustituido en 1980 por Antonio, comenzó a trabajar en los ensayos de esta obra que montó para su propia compañía y que decidió disolver recientemente. «Gades nos ha dado la alegría del milenio», dijo ayer en conferencia de prensa, Aída Gómez, directora artística del Ballet Nacional de España, que hoy y mañana estará en Madrid, en el Teatro Coliseum, como plato fuerte de la programación del Festival del Milenio. Un Festival que celebra este año su primera edición en Madrid y que, con una programación similar, se celebra también en Barcelona, por segundo año consecutivo.
Aída Gómez confesó que le ha costado un año convencer a Gades para que vuelva a trabajar con el Ballet Nacional de España. «Era intolerable que en el repertorio de la compañía no tuviéramos ninguna obra suya. Al aceptar nos ha dado la alegría del milenio. Después de esto ya me puedo ir», comentó la directora artística del Ballet Nacional, quien tiene previsto bailar en la obra, aunque no así el bailarín y coreógrafo alicantino. «Antonio no da sus coreografías a nadie, por eso es un orgullo que haya aceptado recuperarla para nosotros», apuntó Gómez.
Aída Gómez aseguró tener muchos proyectos para el futuro, pero el que le tiene más obsesionada, aparte del trabajo con Gades, es una nueva coreografía sobre el «Concierto de Aranjuez» del maestro Joaquín Rodrigo, que quiere estrenar en abril próximo y en Valencia, sobre versión del guitarrista Paco de Lucía. La directora le presentó el proyecto al maestro antes de morir en el verano de 1999 y «le encantó», aseguró Gómez.