La lectura de la novela «Réquiem por Peter Pan», de Carlos Martorell, fue el punto de partida de un ambicioso proyecto de una serie de televisión titulada «Ibiza», que comenzará a rodarse en abril de 2002 y será proyectada en 90 países. El lector del libro de Martorell fue Claudio Biern, presidente de la productora BRB Internacional, que contactó con el prestigioso relaciones pública «para que fuera el asesor, con el fin de que la imagen de Eivissa sea implecable y de alto nivel», según explicó a este periódico. En el proyecto se han unido la productora alemana Victory Media Group y la italiana De Angelis.
La intención de los productores «es que la serie se pase el domingo y para familias, por lo que los argumentos han de ser mucho más light que el de la novela», comentó Martorell, añadiendo que «este verano se enviarán algunas cámaras para hacer tomas de ambiente en playas y otros escenarios».
Sin concretar todavía el director de la serie, ni los protagonistas, el guión está siendo escrito por varios autores de los tres países involucrados, con un objetivo triple: divertir, informar y dar un mensaje de optimismo. Las protagonistas de «Ibiza» son cinco chicas atractivas, que proceden de Italia, Brasil, Francia, España y Alemania. A través de su amistad, amores e intentos por sacar adelante sus respectivas vocaciones, descubrirán la vida y cómo ser feliz realizándose como personas y como profesionales que disfrutan tanto de su ocio como de su trabajo. Junto a estos personajes centrales, hay otros complementarios, como un pintor famoso y una modelo francesa, ambos ya maduros y con muchas experiencias y vivencias que servirán de punto de referencia a las protagonistas.
Los capítulos, de 52 minutos tendrán unidad propia dentro del gran contexto de la serie, que irá uniendo la trama en el desarrollo de los sucesivos episodios, que tendrán como leit-motiv el descubrimiento de sí mismas a través de la amistad, el amor y la realización personal. «En principio serán 13 capítulos, aunque a lo mejor la serie se presenta con una tv movie, un pequeña película que serviría como sondeo para ver la aceptación del público», señaló Carlos Martorell, quien ha acompañado a Claudio Biern a la isla para dar a conocer el proyecto a las autoridades locales por lo que tiene de promoción mundial «de ese peculiar estilo de vida ibicenco que ha cautivado a tantas generaciones por combinar sabiamente tradición y vanguardia», según consta en el dossier del proyecto. Y con un claro mensaje vitalista: «despertar en los telespectadores una visión optimista de la vida, en la que si uno quiere y busca el lugar adecuado puede cumplir su auténtica vocación, demostrando que es posible ser feliz en este mundo neurótico tan pronto encontramos lo que necesitamos».