El maestro Luis Antonio García Navarro recibió ayer, a título póstumo, la Medalla de Oro del Palau de la Música de Valencia, «un galardón con el que la ciudad de Valencia quiere reconocer su grandeza musical», según declaró la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá. Los encargados de recoger la medalla fueron la viuda y los hijos del maestro quienes, a su vez, cedieron al Palau de la Música de Valencia la batuta con la que García Navarro dirigió su último concierto, «como símbolo del amor que este artista sentía por todos los valencianos», según señaló su viuda, Amparo lozano.
Tras el acto de entrega del galardón, se ofreció un concierto homenaje a cargo de la Orquesta de Valencia, dirigido por el valenciano Cristóbal Soler y que contó con la participación del solista Joaquín Achúcarro. La Orquesta interpretó el Concierto para piano y orquesta de Joaquín Rodrigo y la Sinfonía número 2 en mi menor, de Serguéi Rachmaninov, un concierto que García Navarro tenía previsto dirigir, en la que iba a ser su quinta actuación al frente de la Orquesta de Valencia en el Palau, de la que fue su director titular desde 1970 a 1974. «Este es el mejor homenaje que se le puede dedicar desde Valencia, aunque nuestro deseo hubiera sido que recibiera la medalla en persona, sabiendo la emoción y la ilusión que tenía puestas en este día», declaró la presidenta del Palau, Mayrén Beneito.