Egipto abrió ayer el concurso internacional para adjudicar el proyecto de construcción de un nuevo museo arqueológico en El Cairo, que albergará la colección completa del tesoro del faraón Tuthankamon. El nuevo recinto, que ocupará un área desértica de 50 hectáreas, se levantará a tres kilómetros de la conocidas pirámides de Giza, y se prevé que pueda ser inaugurado dentro de cinco años.
El ministro egipcio de Cultura, Faruk Hosni, explicó ayer que el concurso, que constará de dos fases, está abierto a todas las empresas internacionales y arquitectos interesados, y que el proyecto será financiado, en parte, por el Banco Mundial y supervisado por la Unesco. Según Hosni, el objetivo es crear un entorno multidisciplinario con el que facilitar, a través de la tecnología, el acceso del público a la cultura y a los secretos de los antiguos egipcios.
La principal atracción del nuevo museo será el tesoro del faraón Tutankhamon, que ha pasado a los anales de la Historia porque su tumba fue la única que se descubrió intacta. En este sentido, el nuevo museo tratará de recrear no sólo el entorno en el que fue hallado el enterramiento, sino la legendaria historia de su descubridor, el arqueólogo británico Howard Carter, quien murió en extrañas circunstancias años después de ser el primer hombre en entrar en la tumba.
Hosni anunció, además, que el antiguo museo, localizado en el centro de El Cairo, será renovado, albergará otras piezas importantes, y se acondicionará para el trabajo de arqueólogos y expertos. También indicó que se tratará de recuperar para este museo grandes piezas expoliadas, como el busto de la reina Nefertiti, exhibido en Berlín.